Así lo aseguró el historiador Carlos Gutiérrez, en diálogo con Radio Up 95.5, en el marco de un nuevo aniversario por la muerte del prócer argentino. Además, realizó un breve repaso por su historia.
“Cuando hablamos de Manuel Belgrano hablamos de un personaje central de la revolución de Mayo, por eso lo llamamos ‘Prócer’, algo que es merecidísimo”, comentó Gutiérrez.
“Él trascendió como una figura central, junto a José de San Martín, por entregar toda su vida a la Patria desde las invasiones inglesas hasta su fallecimiento”, destacó el historiador.
Dicho estatus, le valió para que hoy, más de dos siglos luego de su desaparición física, Belgrano cuente con la tumba visible más importante de Buenos Aires, “en un mausoleo impresionante sobre la avenida Belgrano a pocas cuadras de la que fuera su casa”.
Manuel Belgrano falleció a los 50 años y según Gutiérrez, “para la época, la expectativa de vida era esa, pero él padeció sífilis”.
“La convalecencia final fue bastante triste porque fue un general muy entregado a la causa, a pesar de algunos fracasos, pero con muchos éxitos en el mundo militar”, reveló.
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Su paso por Misiones
Según el historiador, “el documento más importante que hay sobre el paso de Belgrano por la provincia es su propia autografía”.
Allí, Gutiérrez reveló que “el propio Belgrano habla de toda su relación con el gobernador de acá, que era Rocamora, de cómo le fue en su visita y su encuentro con los paraguayos, que le valió la marca de ser un mal militar”.
A su vez, Gutiérrez explicó que “Belgrano fue con la decisión de conformar un primer gobierno patrio y no solo que pierde la gobernación de Paraguay, sino que éste también que se independiza”.
“Ellos cuando declaran su independencia se expresan enseguida y no quieren seguir a España, ni a Buenos Aires”, apuntó el historiador, aunque resaltó que “las fuerzas con que Belgrano fue al Paraguay eran muy pobres”
Abogado, general, prócer. Las múltiples facetas de Manuel Belgrano condicionaron el camino que la Argentina ha recorrido hasta el día de hoy, valiéndole un merecido reconocimiento que, aún a 204 años de su paso a la inmortalidad, se lo recuerda como uno de los padres de la patria.
