El grupo mexicano de música católica Cielo Abierto, brindará este sábado 13 de julio, a partir de las 19 horas, un espectáculo artístico y espiritual sin precedentes en el estadio General Belgrano de Apóstoles.
Un evento impulsado por la Diócesis de Posadas, la Parroquia San Pedro y San Pablo junto a la comuna local, que contará con más de 20 artistas en escena que brindarán una noche llena de música, alabanza y fe.
En este marco, en la presentación del evento, el padre Alejandro Cañete de la Parroquia San Pedro y San Pablo de Apóstoles expresó “ es un evento muy especial, en el que esperamos la gente se acerque a rezar, a agradecer pero sobre todo se acerque para estar en paz y poder entregarle un tiempo a Dios para hablarle con el corazón y encontrar un poco de paz en estos tiempos tan difíciles”.
En tanto, un representante del grupo mexicano destacó la actividad que se viene realizando en distintas iglesias, parroquias y capillas de todo el continente “esta misión nace en nuestra tierra y en base a la reacción de la gente y las muestras de fe sentimos la motivación de llevar esta actividad a otras parroquias, contamos con más de mil eventos desde nuestro inicio como grupo”.
Cielo Abierto
Es una comunidad de misioneros católicos laicos, constituidos y organizados como empresa, que desde hace más de 12 años, dedicados a preparar un encuentro de amor de Dios con las personas, a través de la Adoración Eucarística, retiros, música, predicación, tecnología y medios de comunicación, para que descubran el sentido y propósito real en sus vidas.
Actualmente, Pedro y Cristal matrimonio católico; encabezan la misión Cielo abierto junto con más de 100 ministerios de música van por todo el mundo predicando el Amor Esponsal de Cristo por medio de las Noches de Adoración y conciertos de magna Adoración.
Cielo abierto es más que un concierto, es invitar a las personas a acercarse al Sacramento de la Reconciliación y de la Comunión, es reconocer que Jesús está vivo y presente, cada vez que el sacerdote lo consagra en el altar. Es animar a los laicos, clero y religiosas a vivir la vocación principal a la que Dios nos llama: Amarlo a Él y amarnos los unos a los otros.
(Fuente: Primera Edición)