La reciente habilitación del Paso Rosales reactivó la actividad turística y comercial en San Pedro. Según el intendente Miguel Ángel Dos Santos, este paso fronterizo se convirtió en un motor clave para la economía local.
“Es algo muy positivo, no solamente para el pueblo de San Pedro que trabaja con el turismo, sino también para toda la población. Cargan combustible, comen algo, y hay un movimiento más que importante”, afirmó Dos Santos, en diálogo con Radio Up 95.5.
Impacto en el turismo y el comercio local
El flujo de turistas, tanto argentinos como brasileños, ha incrementado notablemente desde la apertura del paso. “Hoy a la mañana había cola en Paso Rosales bastante importante, y migraciones habilitó más casillas, así que el paso es más rápido”, comentó Dos Santos.
Este dinamismo también beneficia al sector hotelero, ya que muchos viajeros deciden pernoctar en San Pedro. “Los hoteles ya venían trabajando porque sabían que una vez que se abre Paso Rosales son prácticamente 60 días de ocupación asegurada. Este año se notó mucho que vienen, se quedan y al otro día cruzan temprano”, agregó.
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Desafíos en las rutas y trámites migratorios
Pese a los beneficios, el intendente destacó los inconvenientes que los turistas enfrentan en las rutas brasileñas. “La ruta brasilera está muy fea, con demasiados baches. Hay que tener mucho cuidado para evitar accidentes”, advirtió.
Además, explicó que, para agilizar el cruce en Paso Rosales, los turistas pueden registrar sus datos de manera digital, aunque reconoció que no cuenta con detalles precisos sobre el sistema actual.
El impacto económico del turismo fronterizo
El turismo fronterizo no solo trae beneficios. Dos Santos expresó preocupación por el impacto de la devaluación del real brasileño en el comercio local. “Sabemos que la caída del real afecta porque mucha gente cruza a Brasil a buscar mercadería. Eso complica a nuestro comercio y podría reducir la recaudación local”, lamentó.
