Yonatan Ariel Da Silva, un joven de 32 años, que al momento de cometer el crimen tenía 28, el día jueves 6 de agosto de 2020, en plena pandemia, a las 11.50 se llegó a la casa de su papá y tras ingresar habló algunas palabras con su madrastra, sacó un arma y mató a la mujer.
El hecho se consumó ubicada sobre la calle Vélez Sarsfield del barrio Las Leñas de la ciudad de Puerto Iguazú, con un revólver calibre 38 y de un balazo en la cabeza. La víctima era Patricia Fixa Mereles de 31 años, pareja del progenitor del acusado.
Casi dos años después, el jueves 19 de mayo de 2022 el imputado fue condenado a prisión perpetua por el delito de femicidio en el Tribunal Penal de Eldorado. El defensor oficial fue a casación, en busca de una apelación para su cliente y una vez revisado el fallo por el Superior Tribunal de Justicia (STJ), y en una resolución casi unánime, ordenó que se fije una nueva condena acorde a lo que consideraron los jueces.
Para el máximo órgano judicial de la provincia no fue femicidio y como no se puso en discusión el hecho, debe determinarse una nueva condena por homicidio (con los agravantes de uso de arma de fuego y portación ilegal). Sea cual fuere el nuevo fallo, no tendrá una reclusión perpetua.
La fijación de una nueva pena no tiene antecedentes en el Tribunal Penal de Eldorado, será la primera vez que los camaristas se reunirán para llegar a un nuevo fallo ya que deben descartar la calificación de femicidio. Se ajustará a la figura de homicidio (artículo 79) que prevé una pena de 8 a 25 años de prisión, según trascendió.