El abasto San Isidro de Garupá fue el escenario de un millonario robo. Un expleado está acusado de ingresar en plena madrugada a su antiguo trabajo y robar un botín de aproximadamente 10 millones de pesos.
Una trabajadora descubrió, ayer por la tarde, que la llave del cofre del seguridad no estaba y al revisar las cámaras de seguridad observaron que en horas de la madrugada un delincuente ingresó al lugar y se dirigió hasta un depósito donde intentó camuflarse al vestirse con chaqueta, cofia, pantalón blanco y barbijo.
Tras ingresar, fue hasta la zona de la tesorería, tomó una llave y vació la caja de seguridad donde se hallaban unos 10 millones de pesos en efectivo, para luego huir de la escena a bordo de una motocicleta.
Con todos los elementos sobre la mesa, efectivos de la Comisaría Decimocuarta e investigadores de la Unidad Regional X comenzaron a realizar rastreos que permitieron llegar hasta un sospechoso que anoche fue detenido tras una serie de allanamientos efectuados en Garupá, procedimientos en los cuales se recuperó parte del dinero presuntamente sustraído.
El detenido fue identificado como Cristian Gabriel G. (23), un joven que hace un tiempo trabajó en el mismo abasto y habría sido reconocido en las cámaras de seguridad.
De acuerdo a fuentes policiales al ser aprehendido se le incautó casi 300.000 pesos en efectivo que tenía entre sus ropas, además de una motocicleta Honda Titán, un barbijo y un Iphone S9.
Además, os investigadores además allanaron la vivienda de la novia del detenido, en el barrio Ñu Porá, donde encontraron una mochila con casi 6 millones de pesos más. El implicado quedó detenido y a disposición del Juzgado de Instrucción Dos, a cargo del magistrado Juan Manuel Monte.