Con los objetivos de garantizar el acceso a la salud menstrual de niñas y adolescentes, para “el pleno desarrollo de su potencial”, el Estado entregarán toallitas femeninas y copas menstruales. La resolución 393/2023 firmada por la ministra de las Mujeres, Ayelén Mazzina, ya entró en vigencia.
El Ministerio de Mujeres, Géneros, y Diversidad oficializó el Programa Nacional MenstruAR mediante la Resolución 393/2023 publicada en el Boletín Oficial de este martes 18 de julio, una medida que busca lograr una “gestión menstrual saludable” y el “acceso a los derechos de educación, recreación, trabajo y salud de parte de mujeres, niñas y adolescentes”, a partir de la creación de un multimillonario subsidio. Se estima que en el país, hay más de 12 millones de personas que menstrúan, las cuales serían la población objeto de esta normativa que entró en vigencia desde el momento de su publicación.
Según la resolución, “la gestión menstrual es una cuestión relacionada con la garantía de Derechos Humanos esenciales planteados en la Agenda 2030 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)”.
Y, por otra parte, los autores del proyecto recuerdan que un grupo de expertos y expertas en derechos humanos de la ONU instaron “a los países partes a tomar medidas para romper con el tabú social en relación a la salud menstrual y ejecutar líneas políticas específicas para garantizar los procesos de salud para personas menstruantes, refiere que el estigma y la vergüenza generados por los estereotipos en torno a la menstruación tienen graves impactos en todos los aspectos de los derechos humanos de las mujeres y las niñas (la salud, la vivienda, el agua, el saneamiento, la educación, al trabajo, la libertad de religión o de creencias, condiciones de trabajo saludables, y de participar en la vida cultural y pública sin discriminación)”.
De acuerdo con los fundamentos del programa “la salud menstrual está íntimamente relacionada con la capacidad de las personas para ejercer sus derechos” y “una gestión menstrual saludable permite que las mujeres, niñas y personas que menstrúan accedan a sus derechos a la educación, la recreación, el trabajo y la salud”.
“Hay más de 12.000.000 de personas que menstrúan. Los productos de gestión menstrual pueden ser hasta un 50% más costosos que el promedio de precios de los productos de la canasta básica. Teniendo en cuenta que en un hogar puede haber más de una persona menstruante, esto puede significar costos muy elevados para aquellos en situaciones vulnerables”, señalaron los autores del proyecto que crea el programa nacional MenstruAR.
Asimismo, “según un estudio de UNICEF (2021) casi 10% de las personas consultadas no van a la escuela durante la menstruación y 23% siente vergüenza o incomodidad. En Bs As, en la Primera Encuesta de Gestión Menstrual de la Defensoría del Pueblo de la provincia (2020), casi la mitad de las personas encuestadas manifestó haber dejado de ir a la escuela o a la facultad (47,9%) a eventos sociales (43,9%) y más de dos tercios (75,6%) dejo de hacer deportes durante la menstruación”, indicaron en la resolución 393/2023.
En la norma, están anexados los modelos de actas de entrega de copas menstruales y toallitas femeninas.
Respecto de los recursos necesarios para sostener el programa nacional mencionado, el artículo 5 de la resolución afirma, escuetamente: “El gasto que demande el cumplimiento de este Programa se financiará con cargo a las partidas presupuestarias del Programa 19, Jurisdicción 86, SAF 386”. Es un hecho que el programa demandará varios millones de pesos mensuales, que serán aportados por el Estado en plena campaña electoral y en un contexto de incremento de la inflación, la pobreza y la indigencia en todo el país.