Las tres iniciativas figuran en el temario que comunicó la Jefatura de Gabinete al Congreso; en la modificación a las funciones del Estado estaría la parte más fuerte del paquete
El Gobierno convocó el viernes por la noche a sesiones extraordinarias con la idea de enviar la semana próxima -la última del año- los proyectos de ley que Javier Milei quiere que el Congreso trate antes de marzo. En el temario aparece en primer lugar una iniciativa para reformar “las funciones del Estado”, que sería la parte más fuerte del paquete que deberá ser tratado hasta el 31 de enero. La administración libertaria también pretende revertir las modificaciones al impuesto a las Ganancias e impulsar la instauración de la boleta única de papel para el próximo turno electoral.
En una nota remitida por la Jefatura de Gabinete al Congreso, el Poder Ejecutivo convocó a sesiones extraordinarias desde el 26 de diciembre hasta el 31 de enero. Posteriormente, se conoció el temario: Milei solicitó que se trate su proyecto de “Ley de reforma de las funciones del Estado”, la iniciativa más densa del listado; envió un proyecto para revertir la última modificación del impuesto a las Ganancias que había sido votada en la campaña presidencial y solicitó que se trate el proyecto de boleta única que tuvo media sanción en Diputados.
Según pudo reconstruir este medio, la “Ley de reforma de las funciones del Estado” se trataría de un proyecto similar a una “ley ómnibus” con las reformas tributarias y políticas que el Presidente no incluyó en su ambicioso decreto de necesidad y urgencia (DNU), porque son materias a tratar exclusivamente por el Congreso. La iniciativa también contendría otro capítulo de reformas en la administración pública, lo que podría habilitar las privatizaciones.
Según señalaron fuentes muy cercanas a Milei, finalmente el Gobierno optó por incluir todo su paquete de reformas en un solo megaproyecto de ley y no presentarlo en tres iniciativas distintas o tres “combis”, como ilustraban algunas fuentes oficiales la semana pasada. Este fue un tema de debate interno, pero finalmente en la Casa Rosada se inclinaron por la alternativa más ambiciosa: la de incluir todo en un solo texto. “Creemos que compartimentarlo empioja el proceso legislativo”, comentó un importante colaborador oficial.
Los tiempos y los proyectos
En el capítulo de reforma electoral, Milei quiere que se trate la boleta única. En este último caso, requirió el tratamiento del proyecto que tiene media sanción de Diputados, que replica el modelo de votación de Córdoba que es bien visto por la Casa Rosada.
En el capítulo tributario, según trascendió inicialmente, habría un blanqueo de capitales y una moratoria de regularización de deudas con la AFIP por 120 días, además de modificaciones en bienes personales, pero esta noche aún no había conformaciones al respecto. En el temario de las extraordinarias finalmente se incluyó el proyecto para revertir la modificación del impuesto a las Ganancias que se aprobó durante la campaña electoral por iniciativa de Sergio Massa y que Milei votó favorablemente.
Esto es en respuesta al reclamo de los gobernadores, que vieron caer los fondos de la coparticipación por la modificación de los pisos del impuesto que pesa sobre el salario. Los mandatarios peronistas reclamaron una compensación a través del impuesto al cheque, pero la Casa Rosada se negó con el argumento de que esa alternativa altera el equilibrio fiscal nacional. Milei prefiere volver sobre sus pasos con Ganancias antes de alterar la ecuación de déficit cero de Luis Caputo.
Por último, en el temario de extraordinarias incluye algunos puntos formales, como el permiso para que el Presidente pueda viajar al exterior (tiene previsto viajar al Foro de Davos a mediados de enero) y cuestiones relativas a las Fuerzas Armadas. También proyectos para eliminar la doble imposición en materia tributaria con cinco países.
El DNU de la polémica
En el temario de las sesiones extraordinarias el Presidente no pidió expresamente que el Congreso trate el DNU con desregulaciones económicas. Ese texto generó fuertes resistencias en casi todo el arco opositor porque considera que el Poder Ejecutivo se extralimitó en sus facultades. “Al Gobierno no le conviene que el DNU se trate en extraordinarias, van a apuntar a dilatarlo lo antes posible”, comentó una fuente legislativa.
En la Casa Rosada se muestran confiados y ponen de relieve que “ningún DNU de la democracia fue invalidado por ambas Cámaras”. A excepción de una porción de Pro, los bloques opositores ya manifestaron fuertes reparos por los alcances que tuvo el DNU, ya que modificó de un plumazo cientos de leyes sin abrirle juego al Congreso. Ese clima abre la posibilidad de que se conforme un frente de rechazo al megadecreto que pueda bloquear su implementación.
Cerca de Milei se muestran confiados y dicen que ese camino no terminará de prosperar: es más, creen que es posible que el DNU quede cajoneado en la comisión bicameral permanente que controla la constitucionalidad de los decretos de necesidad y urgencia, la primera estación que tiene el DNU en el Congreso.
Sin embargo, de no expedirse la comisión bicameral en diez días, el DNU quedará habilitado para su tratamiento en ambas cámaras sin necesidad de un dictamen que lo habilite. El kirchnerismo ya exhibió fuerte decisión para tratar de invalidad el decreto y hay un grueso de bloques legislativos -la UCR, Cambio Federal y distintos bloques provinciales- que mostraron su descontento con el proceder del Poder Ejecutivo.
(Fuente: La Nación)