El Senado financiaba la participación de la delegación nacional en las Olimpíadas Internacionales de Matemática desde 1990. Esta vez no hubo respuesta de las autoridades, por lo que los profesores y estudiantes tuvieron que organizar una colecta para financiar su participación: juntaron 30 millones de pesos en una semana. La instancia internacional será en la segunda semana del mes de julio en Reino Unido.
Seis estudiantes argentinos de secundaria participarán en julio en la 65° Olimpiada Internacional de Matemática (OIM) que se realizará en la ciudad de Bath, en el Reino Unido. El financiamiento para sus pasajes, no fue habilitado por la Cámara alta. Por eso, la delegación argentina tuvo que juntar donaciones por medio de una colecta online para poder representar al país en el certamen de matemática más importante del mundo. El año pasado, Argentina ganó allí dos medallas.
El equipo argentino estará compuesto por Felipe Bautista Klir, del Instituto Libre de Segunda Enseñanza (ILSE); Emiliano Sosa, de la Dante Alighieri; Uriel Digestani, de la ORT; Matías Álvarez Oviedo, del Instituto Politécnico de Rosario; Ignacio Javier Naguil, del Colegio Nuestra Señora de Fátima, de Río Gallegos; y Lola Ruffolo, del Instituto Politécnico de CABA.
La experiencia misionera en las olimpiadas internacionales
Nicolas Romero, es misionero y formó parte del equipo argentino en el año 2005 en México, hoy es ingeniero quimico, es egresado de la Escuela Normal Mixta Estados Unidos de Brasil de Posadas. Se refirió a su experiencia y a cómo las matemáticas están presentes en nuestra vida cotidiana.
“Me pareció un poco raro que no estén los fondos, cuando desde hace mucho tiempo estuvieron y siempre se permitió a los chicos que pudieran viajar, no solo a la instancia internacional que es la más importante sino a instancias iberoamericanas, o del cono sur. Estas son actividades muy importantes”, dijo Romero en diálogo con el programa “El País de la Libertad”.
“Primero para poder llegar a esa instancia uno tiene que sortear diferentes fases. Uno pasa de una competencia a nivel de la escuela, después uno entre colegios, uno a nivel de la zona, los provinciales, regionales, regionales, nacionales, pasa de instancia por a un selectivo, y una vez que pasa ese selectivo, fíjense la cantidad de instancia que hay, uno que cuando pasa de un selectivo, cuando entran los seis mejores recién ahí, a nivel país en los que viajan. Es un montón. Con varias instancias, una vez que se llegue ahí, ahí hay un entrenamiento intensivo de un mes en la UBA, donde se trabaja con exolímpicos, con profesores de la UBA. Es un entrenamiento muy intenso. Y luego de ahí, recién uno está preparado como para poder ir a afrontar ese mundial”, contó Romero sobre la preparación previa a las olimpiadas.
Con respecto a la enseñanza de la matemática en las escuelas, Nicolás Romero expresó “La realidad es que siempre el método enseñanza tradicional que se utiliza por ahí resulta muchas veces aburrido para las personas, por ahí no le determinan cuánto es el atractivo que tiene. Pero la realidad es que la matemática es muy linda, y está presente todo el tiempo en nuestra vida”.
“Hay profesores que con diferentes herramientas permitan a los alumnos poder plantear diferentes formas de aprendizaje, resolución de problemas, de desafíos, y justamente eso los lleva a querer desafiarse, querer entender un poco más y querer un poco más. Cuando uno genera esa intriga, esa pasión, cambia radicalmente como uno ve la materia”, sostuvo el misionero que participó de las olimpiadas internacionales de matemáticas en el 2005.