Mientras desde la Aduana se comunicó que no habrá permisos de embarque hasta que se llegue a un acuerdo de precios, el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, dijo en Twitter que no había suspensiones de las ventas al exterior.
En medio de una fuerte suba de la hacienda y de la carne ahora en el marco de la devaluación, el Gobierno decidió hoy suspender por 15 días las exportaciones de carne vacuna, según confirmaron fuentes oficiales. La hacienda, que por el dólar maíz, que aumentó los costos de alimentación, había trepado antes entre un 20 y un 30%, en la última semana volvió a dispararse y a hoy acumuló un incremento del 40%. Según operadores del mercado de la carne, para mañana se prevé un traslado en torno de un 40% al público.
“La medida se tomó a la espera de un acuerdo de precios con el consorcio de frigoríficos”, dijo una fuente de la Aduana ante una consulta de este medio. Agregó sobre la suspensión de las ventas al exterior: “Sin acuerdo, no habrá permisos de exportación”.
Mientras desde la Aduana difundieron la novedad sobre la suspensión de las ventas al exterior, el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, negó a través de las redes sociales el cierre de las exportaciones de carne. “Nuestra responsabilidad como funcionarios públicos es llevar certidumbre a los sectores productivos y tranquilidad a la gente. Desde @Economia_Ar estamos negociando los precios de carnes para el mercado interno y no hay suspensiones a la exportación de carnes”.
En este marco, según trascendió, la Aduana decidió “bajar a piso” y “verificar los contenedores” de los barcos. Una fuente consultada hizo una amenaza a los exportadores: “Van a tener que asegurar mercado interno con precio”. La Aduana pasó a canal rojo las exportaciones de carne.
Otra fuente advirtió que “el gasto en costo logístico para las empresas es millonario”. Agregó: “Van a tener que asegurar entre un precio razonable interno o gastar en costos logísticos”.
En una de las cámaras que agrupa a los exportadores de carne les informaron que el cierre será por 15 días. “Los permisos que están vigente los van a sacar, pero el resto no lo creo. No nos van a dar más permisos. Así nadie va a exportar nada”, dijo una fuente empresaria.
“Todo lo que se exporte y toque al mercado interno se va a haber afectado [por la medida]. No se cerró, sino se trabó [la exportación]”, apuntó una fuente oficial. El Gobierno convocó a las cámaras exportadoras a una reunión para esta tarde para evaluar la medida, aunque todavía no se confirmó quienes formarán parte.
Ayer, el director de Aduana, Guillermo Michel, fue nombrado por el ministro de Economía, Sergio Massa, como la persona clave para negociar acuerdos de precios con los diferentes sectores. A través de una resolución de ese Ministerio se creó una unidad que estará encabezada por Michel. La máxima figura de la Aduana estará secundada por Matías Tombolini, secretario de Comercio, Gabriel Rubinstein, viceministro de Economía, y Carlos Castagneto, titular de la AFIP.
Esta decisión se conoció en medio del contexto económico del país, tras la medida del Banco Central de subir de $287,35 a $350 el tipo de cambio oficial mayorista. Se trata de un alza de 21,8%. En el sector estiman un aumento en el precio de la carne vacuna para el consumo interno que va en torno al 40%. Mientras que en la actividad privada dijeron que aun con los aumentos pasados la carne aún tenía una brecha con la inflación del 50%.
Impacto
Del martes pasado a este, el precio del novillo liviano en el mercado ganadero pasó de $650 a $930, casi un 50% que, según fuentes del sector, llevó esta tarde misma a cambiar las pizarras rápidamente en alrededor de un 40% hacia arriba para el consumidor.
Los valores todavía muestran un retraso con respecto a la inflación. Según el consultor ganadero Víctor Tonelli, desde julio de 2021, considerando a ese mes como base 0 e indicador comparativo para el cálculo, mientras el novillito para consumo subió 168,9% la carne al púbico lo hizo un 162,4% y la inflación general un 223,5%.
Hace unas semanas, el Gobierno decidió realizar un estricto control en el Mercado Agroganadero de Cañuelas, mediante una delegación del Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial (RUCA) dependiente de la Secretaría de Agricultura que conduce Bahillo para registrar los precios.
En ese momento, consignatarios consultados dijeron que, en realidad, la comitiva llegó para “asustar” a la gente por el aumento de la hacienda que repercutió en la carne. Desde la cartera agrícola en ese momento señalaron que se trató de una visita normal, que no hubo nada extraño ni fue sorpresa. Negaron que se tratara de una inspección repentina.