Una mujer que trabajaba como empleada doméstica fue detenida en Posadas tras ser acusada de estafar a sus empleadores con compras online realizadas con datos de sus tarjetas de crédito. Durante la investigación, su pareja terminó también arrestado por presunta tenencia de material de abuso sexual infantil, hallado en uno de los dispositivos electrónicos secuestrados.
El caso se inició a partir de la denuncia de un vecino del barrio San Onofre, quien advirtió consumos no autorizados en su tarjeta. La investigación de la Dirección Cibercrimen de la Policía de Misiones y la Fiscalía Especializada en Ciberdelitos rápidamente apuntó a la empleada de la vivienda, una mujer de 36 años que habría fotografiado los plásticos de sus patrones para realizar compras a través de plataformas digitales y servicios de delivery.
Fue interceptada en Alem con dos jóvenes a bordo. El vehículo había sido entregado como parte de un engaño en un intercambio en Oberá.https://t.co/SHZTnjAmXY
— RadioUp (@radioup955) June 5, 2025
Con orden judicial, la Policía allanó el domicilio de la sospechosa días atrás, donde secuestraron diversos elementos adquiridos fraudulentamente y dispositivos electrónicos que fueron sometidos a peritaje. Fue durante ese análisis técnico que los agentes especializados detectaron archivos y capturas de pantalla relacionados con material de abuso sexual infantil, vinculados al teléfono de la pareja de la mujer.
Ante el hallazgo, el Juzgado de Instrucción N.º 7 ordenó un segundo allanamiento, llevado a cabo este miércoles 4 de junio, con la presencia del fiscal Juan Pablo Espeche. En el procedimiento se incautaron nuevos dispositivos, entre ellos pendrives y teléfonos celulares, y se procedió a la detención de un hombre de 52 años, quien quedó a disposición de la Justicia.
La causa continúa en etapa investigativa. Las autoridades no descartan que la mujer también haya tenido algún grado de participación en la tenencia o posible distribución del contenido ilícito, además de ampliar la pesquisa para determinar si las estafas con tarjetas se repitieron en otros domicilios donde trabajaba.