La entidad tuvo que dejar de faenar pollos, su principal fuente de ingresos, ya que las autoridades competentes aún no han enviado técnicos para evaluar el lugar, a pesar de las largas esperas desde 2019.
En una reciente entrevista exclusiva con “La Última Rosca” Samuel Doichele, presidente de la Cooperativa Integral del Norte, abordó los desafíos que enfrenta la producción avícola en la provincia de Misiones. Desde su sede, compartió su perspectiva sobre el difícil panorama que marcó el inicio de año para la industria avícola local.
“Desde el 2023, seguimos sin contar con la habilitación de la planta de faena avícola por parte de la provincia y los ministerios correspondientes”, expresó Doichele. Esta situación generó un estancamiento en la producción, ya que las autoridades competentes aún no han enviado técnicos para evaluar el lugar, a pesar de las largas esperas desde el 2019.
El presidente de la cooperativa señaló que, si bien la industria obtuvo la radicación por parte de las autoridades, la habilitación es un proceso aparte que sigue pendiente. “Industrias nos dio la radicación, pero la habilitación es otra cuestión. No entiendo por qué tantas trabas”, agregó Doichele.
A pesar de que el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) levantó recientemente algunas restricciones sobre la cría de pollitos, la falta de habilitación provincial continúa siendo un obstáculo para la cooperativa. Esto generó preocupación sobre la viabilidad a largo plazo de la industria avícola en la región.
Además, afirmó que “el diálogo con la Municipalidad fue positivo, con un cambio de intendente que mostró un mayor compromiso con la cooperativa. Sin embargo, el verdadero obstáculo parece residir en el Ministerio del Agro, que ha retrasado las decisiones cruciales para la habilitación de la planta”.
Deudas
En cuanto a los costos operativos, la cooperativa enfrenta una carga financiera significativa debido a la necesidad de mantener la planta conectada a la energía eléctrica. “Estamos pagando entre 30,000 y 50,000 pesos por mes en el servicio eléctrico, aunque la planta no esté en funcionamiento”, lamentó Doichele.
También mencionó los desafíos políticos, como «la falta de apoyo y comprensión por parte de las autoridades pertinentes. En particular, expresó su descontento con Roque Gervasoni, exdirector del Instituto de Fomento Agropecuario e Industrial (IFAI), quien difundió información incorrecta sobre las condiciones de la planta de faena sin realizar inspecciones, lo cual no es un hecho aislado, reconocido por realizar posteos en su red social Facebook y luego borrarlos».
Captura del mensaje publicado en su red social que sería borrado horas más tarde
La Cooperativa Integral del Norte continúa luchando contra la burocracia y la falta de apoyo gubernamental para impulsar la producción avícola en Misiones. Mientras tanto, la incertidumbre persiste para los productores y la economía local, que no se dejan vencer y sustentan los gastos entre ellos “cada productor aporta un poco, no hacemos una vaquita entre todos y con fruta y mandioca que podemos vender
Es de vital importancia reconocer que faenar alrededor de 3.000 pollos es mínimo un porcentaje que representa aproximadamente el 2% de la del consumo de carne de pollo, lo que se aspira es a duplicar con el funcionamiento de la planta, que además permite el mantenimiento e ingresos de numerosas familias de la chacra.
Un funcionamiento indispensable
Créditos: Radio Identidad
La falta de habilitación y funcionamiento de la planta de faena avícola no sólo afecta directamente a la producción de carne de pollo, sino que también tiene repercusiones significativas en otras etapas de la cadena productiva. Al mirar hacia atrás en esta cadena, es crucial comprender el papel de los productores de maíz, quienes proporcionan alimento para los pollos. La paralización de la planta no solo repercute en los productores avícolas, sino también en aquellos dedicados a la siembra de maíz, quienes ven comprometida su actividad al no contar con un mercado estable para sus productos.
Además, el ciclo productivo de los pollos no termina con su sacrificio en la planta de faena. La generación de materia fecal por parte de los pollos se convierte en un recurso valioso, constituye un abono natural rico en nutrientes para otras producciones locales. Los productores agrícolas se benefician directamente de este estiércol, les permite fertilizar sus huertas y plantaciones sin necesidad de recurrir a materiales externos, como los provenientes de Entre Ríos.
Estos factores, sumado al desconocimiento del territorio por parte de las autoridades y la necesidad de políticas específicas para la producción ganadera están presentes afectando no solo la industria avícola, sino también para la estabilidad y el desarrollo de toda la cadena productiva aviar y agrícola en la región.