El Campeonato Misionero de Rally no solo destaca por la velocidad y la competencia, sino también por la solidaridad de sus participantes. Carolina Colmán, piloto de quads, es un ejemplo notable de este espíritu altruista que acompaña a la adrenalina de las carreras.
En dialogo con “Cabina Deportiva” por Radio Up 95.5, Carolina compartió detalles sobre su participación y las iniciativas solidarias que han marcado cada fecha del campeonato. “Desde la primera fecha del calendario misionero de rally arrancamos con una escuelita que justo quedaba en el Soberbio. Siempre buscamos una escuela que quede en la localidad a correr”, explicó Colmán. Esta estrategia ha permitido que las donaciones lleguen directamente a las comunidades donde se desarrollan las competencias.
La próxima fecha del campeonato, que se correrá en Puerto Rico y Capioví, no será una excepción. Carolina y su equipo ya han identificado las necesidades de las escuelas locales. “En esta ocasión, lo que más nos recalcaron los directivos fue leche, azúcar, harina porque ellos entre la merienda y el desayuno, lo que más hacen los padres es preparar para los chicos”, comentó Colmán. Además, se necesitan abrigos, zapatos, zapatillas, elementos de limpieza, banderas, y pintura para las escuelas.
La piloto destacó la colaboración con su grupo de entrenamiento y el apoyo de la comunidad. “Yo soy profe, soy entrenadora personal y tengo un grupo de mujeres, entonces entre todos empezamos a viralizar con los de prensa de la APINAR también, que son los que me ayudan a viralizar mucho lo que es esto. Se ha logrado juntar muchísimo para Puerto Rico y Capioví”, dijo Carolina.
Para quienes desean sumarse a la causa, Carolina ofreció detalles sobre cómo colaborar. “Pueden contactarse conmigo directamente. Mi número de teléfono está disponible y lo vamos a publicar en las redes. La gente puede escribirme, yo les paso la ubicación de mi gimnasio o voy a buscar las donaciones. Estaré recolectando todo hasta el jueves, porque ya el viernes quiero tener todo organizado para viajar a la madrugada”, explicó.
El impacto de estas iniciativas se refleja en la gratitud y alegría de las comunidades beneficiadas. “Ellos te reciben con los brazos abiertos, los chicos vienen corriendo, te abrazan, no quieren que te vayas. A veces voy con el quad y se sacan fotos. Después van a las carreras, me alientan y me dicen ‘yo soy de la escuela tal’. Es algo muy cálido, muy lindo que te llena de satisfacción y mucho amor”, relató Carolina.
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En cuanto a su incursión en el mundo del rally, Carolina compartió su emocionante historia. “Esto arrancó el año pasado, a principios del año pasado, gracias a una dupla de amigos que corren auto. Los acompañaba en todas las carreras y veía que habían cuatriciclos y que corrían chicas. Yo tenía cuatriciclos, pero no de carrera. Le planteé a mi marido y le dije ‘yo también quiero correr’. Pusimos manos a la obra, compramos los elementos necesarios y empecé a entrenar”, recordó.
La piloto recibió la autorización de la APINAR para participar en tres Super Prime como prueba de su preparación. “Me dieron el ok para poder correr todas las fechas este año”, dijo con orgullo.
