Según confió el productor yerbatero Víctor Chamula, quien era custodio del actual subsecretario de asuntos yerbateros, Julio Peterson, fue nombrado presidente del llamado “Polo Industrial Yerbatero más grande del país”, entre otros nombramientos de dudosa legalidad, que benefician al extitular del INYM, Jonas Peterson. Además, Chamula cuestionó el rol del instituto. “Cumple tres roles: persecutor, recaudador y agencia de turismo”, disparó.
En el marco de la crisis del sector yerbatero por la desregulación de los precios y el ingreso masivo de hoja verde proveniente del Paraguay y del Brasil, lo que impactó en una sobreoferta de materia prima y en una caída de los precios productivos, los principales referentes del sector mantuvieron una reunión y definieron, por el momento, no movilizarse, aunque hay planteos de tomar el Instituto Nacional de la Yerba Mate, según reveló el presidente de la Asociación Ganadera de Andresito, Víctor Chamula.
Este martes, Chamula cuestionó el rol del INYM, que en la actualidad, sin capacidad de definir precios o cupificar plantaciones, cumple las funciones de “persecutor, recaudador y agencia de turismo”. Y lanzó una fuerte denuncia contra el exdiputado y actual subsecretario de asuntos yerbateros de Misiones, Julio Peterson, por los posibles “acomodos” que benefician a familiares y allegados dentro del Polo Yerbatero de Andresito.
En diálogo con “El País de la Libertad”, Chamula mencionó los puntos que se acordaron en una asamblea en Andresito, en las últimas horas, y recalcó que no se pagará menos de $370 por kilo de hoja verde. “Se acordó el precio de la hoja puesta en secadero y los plazos de pago, que fue el primer punto. Y bueno, lo que se decidió prácticamente por unanimidad es no parar la cosecha porque hay secaderos que sí están pagando los $370”, puntualizó el referente yerbatero.
“Lo que sí se están estirando los plazos de pago, que es por una cuestión muy lógica. En este momento hay una sobreoferta de hoja verde, los secaderos están abarrotados de yerba y como no están dadas las condiciones como para pagar todo de contado. Así que eso no sería un problema. Ahora lo que sí, que se respete (el precio sostén de) $370. Es lo que se dijo en asamblea y lo que expresaron los representantes de algunos secaderos que básicamente son los que le entregan la yerba mate a Playadito, que es la cooperativa que le compra prácticamente a todas las otras pequeñas cooperativas y secaderos particulares, la yerba canchada que al bajar el precio tuvieron que bajar sí o sí, no tienen manera de sostener los valores”, comentó Chamula, vinculando la apertura de importaciones de yerba mate y el ingreso de materia prima de Paraguay y Brasil, con la caída de los precios que están pagando a los productores.
Además, Chamula confió que si no se cumplen los precios mínimos, la asamblea definió que en “cada localidad, cada sector de la provincia vayan haciendo sus asambleas, sus reuniones para ver qué medidas se va a tomar de acá a futuro.”
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Consultado por la situación del INYM, que está acéfalo y perdió la potestad de fijar precios y cupos de plantaciones, Chamula fue enfático en su cuestionamiento al actual funcionamiento. “El Instituto Nacional de la Yerba Mate hoy está ocupando básicamente tres roles. El rol de persecutor, recaudador y de agencia de turismo. Otra función no cumple”, fustigó el productor, poniendo de relieve una crítica que se hizo al organismo en la Cámara de Diputados, que tiene que ver con los viajes al exterior que han hecho sus funcionarios sin ninguna experiencia en apertura de mercados.
“Por ahí estaban los ánimos candentes en algunos que querían la toma del INYM nuevamente en forma inmediata. Llegamos a acordar de alguna manera, no hacerlo momentáneamente por dos razones. Una que es a ver qué va a pasar con el DNU (70/23 firmado por el presidente Javier Milei), la ley bases y todo este tipo de cosas, que depende cómo se apruebe, si se aprueba, indudablemente el Gobierno Nacional va a disolver el instituto”, explicó Chamula, añadiendo que la incertidumbre sobre lo que ocurrirá con los proyectos del gobierno, impacta en la cuestión del INYM.
Apuntando a que los desmanejos del instituto deben ser resueltos por los propios misioneros, Chamula lanzó fuertes denuncias por presunta corrupción contra Jonas Peterson -director del INYM y expresidente interino- y su hermano Julio Peterson -el exdiputado provincial y actual subsecretario de asuntos yerbateros-.
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En el INYM, “teníamos un presidente que es Jonas Petersson que ha hecho unos desmanes en todo sentido la palabra en el instituto y dos o tres parientes más directos que están dentro de la institución. O sea que la institución está manejada ahí prácticamente por una familia”, fustigó Chamula, y apuntó sus dardos contra el funcionario renovador.
“Se creó una subsecretaría de asuntos yerbateros dentro del ministerio del Agro, y el fundador y presidente, es Julio Peterson. En el molino que se está construyendo acá en Comandante Andresito, que son recursos de todos los misioneros, que el gobierno provincial puso la plata de nuestro dinero, el custodio personal de Julio Peterson, es el presidente del Molino”, denunció Chamula sobre un manejo poco claro en el nombramiento de las autoridades del Polo Industrial Yerbatero.
En esta línea Chamula continuó machacando contra Julio Peterson, al señalar que est presidente de ACTIM” un sindicato “que está adentro del Molino. Metieron una asociación que es una parte sindical, por llamarlo de alguna manera, y está incrustada dentro del molino. Nos desayunamos que Jonas Peterson es asesor personal de Julio Peterson. Entonces, me están cargando”, bramó el dirigente yerbatero.
No obstante, el malestar de los yerbateros en el presente contexto crítico para el sector y para toda la provincia, que está al borde de un estallido social por las protestas salariales de docentes, empleados sanitarios y policías, no derivó en medidas de fuerza en las rutas, según confió Chamula. “El sector yerbatero no va a marchar, por el momento. Vamos a seguir con la cosecha, vamos a seguir trabajando”, sentenció.
