Pese a las amenazas de desalojo y de intervención de la Gendarmería Nacional, policías, penitenciarios y retirados están sumándose al reclamo que se inició esta madrugada. Están llegando policías del interior de Misiones. El juez Balor ya tiene la orden de desalojo lista y llegaron los primeros móviles de la fuerza federal.
Se agrava el conflicto con los policías y penitenciarios de la provincia que reclaman por salarios dignos y cortan la avenida Uruguay a la altura del Comando Radioeléctrico I en Posadas, con la llegada de fuerzas de la Gendarmería Nacional, que estarían listos a intervenir si el juez de instrucción Ricardo Balor firma la orden de desalojo que ya tiene lista.
Los uniformados reclaman la reapertura de la mesa de diálogo policial y una recomposición que lleve los haberes mínimos del sector, por encima de los actuales $400 mil – $450 mil. Sin embargo, la jefatura de Policía a cargo del comisario Sandro Martínez y su jefe político, el ministro de Gobierno Marcelo Pérez, mantienen su postura de no negociar salarios y aplicar recomposiciones por decreto, en torno al 20%.
Más temprano, el juez Balor se reunió con los referentes de la protesta y prometió interceder ante las autoridades provinciales, pero advirtió que va a solicitar la intervención de la Gendarmería para desalojar la avenida Uruguay. El propio gobierno provincial presentó una denuncia para desalojar el lugar.
Pero esto no sólo no tuvo ningún efecto, sino que, al contrario, en horas de la tarde se fueron sumando uniformados a los que en un principio estaban en el Comando. Están llegando policías del interior y de Posadas, que rechazan la postura del gobierno provincial de no sentarse a negociar y dejar que la Justicia desaloje por la fuerza y con la Gendarmería. Según las estimaciones, por estas horas hay unos 2500 – 3000 manifestantes en la avenida, frente al Comando Radioeléctrico I.
En diálogo con C5N, el referente Ramón Amarilla insistió en que se agotaron todas las vías institucionales de reclamo y ante la falta de respuestas, se llegó a esta medida extrema. Recalcó que “quien dice que está tomado el Comando está faltando a la verdad”. Y subrayó que los policías “no llegan al 10 de cada mes” con sus sueldos.
“Hay que buscar una solución, sentarnos dialogar y llegar a un punto medio. En todas las mesas nunca hemos pedido más de lo que corresponde”, insistió Amarilla, añadiendo que sólo solicitan que los sueldos de los policías y penitenciarios les permitan cubrir la canasta básica total. “Un suboficial mayor apenas está llegando a la canasta, imagínense los del escalafón menor. Lo que pedimos es cubrir la parte alimenticia”, subrayó Amarilla.
En un tramo saliente de la entrevista, Amarilla fue consultado sobre si piensan resistir ante un hipotético desalojo por la fuerza ordenado por Balor y con intervención de la Gendarmería. “¿Cómo no vamos a resistir? Vamos a resistir por nuestras familias”, replicó el referente, quien añadió que las consecuencias de un desalojo violento de la protesta policial, correrán a cargo de quien ordene el desalojo.