El grupo de estudiantes pertenecientes al colectivo “Albergados en Lucha” llevó a cabo una intervención durante una actividad organizada en el predio del campus de la Universidad Nacional de Misiones (UNaM).
La actividad, se convirtió en una oportunidad para que los estudiantes expresaran sus demandas y denuncias acumuladas a lo largo de más de un año frente a la presencia de autoridades y visitantes en el campus.
Una de las principales demandas del colectivo se centró en la reciente presentación de un video por parte de las autoridades, en el cual se explicaba un nuevo sistema de asignación de viviendas estudiantiles. En el video se mencionaba la implementación de un sorteo para asignar un máximo de tres casas al mes, lo cual generó indignación entre los estudiantes, considerando que hay un total de 56 casas en el programa de albergues.
Los manifestantes recalcaron su frustración, argumentando que este sistema de sorteo no era la solución adecuada y que no reflejaba las prioridades y necesidades reales de los estudiantes. Hicieron hincapié en que habían proporcionado información detallada sobre las condiciones de las viviendas y las casas que requerían atención urgente, y consideraron el enfoque de sorteo como una falta de voluntad política por parte de la gestión universitaria.
Hace unos días se elevó la preocupación debido a los casos de intoxicación que se reportaron entre los estudiantes del albergue debido a la falta de agua potable. Según los propios jóvenes, dos personas terminaron en emergencia en donde además, les aseguraron que no eran las únicas afectadas y que ya habían tenido otros casos similares por el mismo motivo. El servicio de agua potable había sido reestablecido hace una semana después de un largo período de reclamos por parte de los residentes del albergue.
“No solo nos cortan el agua, la poca agua que llega al barrio, no está potabilizada. Mientras tanto, los encargados pintan un mural por 40 años de democracia para vender humo y recibir a los del ministerio de educación y rectores de otras universidades que vienen a disponer de computadoras en la sala de estudios del campus”, aseguraron.
Otro de los reclamo tiene que ver con la falta de conexión a internet que los estudiantes experimentan desde el albergue donde, aseguran, que no pueden realizar tareas o estudiar debido a la falta de wifi en la zona.
Después de un diálogo con los directivos, se llegó a un acuerdo provisional. Las autoridades se comprometieron a presentar un informe detallado y una hoja de ruta con un cronograma para llevar a cabo arreglos preventivos y de emergencia en las viviendas estudiantiles. Además, se acordó descartar el sistema de sorteo y en su lugar priorizar las casas según su nivel de emergencia y necesidad de reparaciones. “Queremos que se cumpla porque vamos a seguir reclamando por nuestros derechos, estamos hartos de palabras, queremos acciones”, afirmó uno de los estudiantes afectados.