Según un relevamiento realizado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), las ventas en los comercios minoristas pymes registraron en enero una caída anual de 28,5%, y descendieron en la comparación mensual 6,4%.
Los comerciantes minoristas de la capital misionera expresaron preocupación ante la significativa disminución en las ventas durante la temporada de verano, un período que tradicionalmente representa una importante fuente de ingresos para el sector.
El mes de enero marcó una baja de 28,5% interanual, según la medición a precios constantes de CAME, y en términos intermensuales desestacionalizado, se registró un descenso de 6,4%, impulsado por “un mal desempeño en el sector comercial, marcado por escasas transacciones y una baja afluencia de público en los locales”, de acuerdo a la entidad empresaria.
Los resultados surgen del Índice de Ventas Minoristas Pymes de CAME, elaborado en base a un relevamiento mensual entre 1.256 comercios minoristas del país, realizado del 1 y 2 de febrero de 2024, precisó la entidad en un comunicado difundido este domingo.
En diálogo con la redacción de RadioUp.com.ar, M. González, propietaria de una tienda de ropas en el centro de Posadas, compartió sus inquietudes: “Este verano está siendo muy difícil para nosotros. Las ventas están por debajo de lo que esperábamos. La gente simplemente no está gastando como solía hacerlo, y eso nos afecta también. Lamentablemente no nos queda otra que salir a buscar clientes por otros medios”.
Otro comerciante, dueño de una tienda de artículos de limpieza, señaló la conexión entre la situación económica nacional y la desaceleración de las ventas. “La incertidumbre económica lleva a que las personas reduzcan sus gastos discrecionales. La ropa y los artículos que no son de primera necesidad son los primeros en la lista de recortes cuando las personas sienten que tienen que ajustarse el cinturón”, aseguró.
En cuanto a la pregunta de cómo hacen los comerciantes para sobrevivir esta etapa de incertidumbre, estos aseguraron: “Hacemos hasta lo imposible para atraer clientes, salimos a la calle a ofrecer nuestros productos, hablar de nuestras ofertas y también dependemos mucho de las ventas online. Tratamos de mantener los precios lo más posible y las compras con cuotas que son por ahí lo que más salva a la gente”, afirmaron.
Según los emprendedores posadeños, la comodidad y la seguridad de las compras en línea se volvieron más atractivas para muchos, especialmente en un contexto de incertidumbre.
A medida que los comerciantes minoristas de Misiones enfrentan este desafío económico, queda por verse cómo evolucionará la situación durante el resto de la temporada de verano y qué medidas adicionales podrían ser necesarias para revitalizar la actividad comercial en la región.