Envalentonados por la sanción de la ley que reforma el sistema electoral, el cual marca un nuevo paradigma con la aplicación de la Boleta Única Papel para las próximas elecciones legislativas del 2025, ahora el oficialismo libertario pretende ratificar la política del ajuste fiscal.
Evidentemente, más allá del resultado que pueda obtener el gobierno nacional o los opositores, todo indicaría y hace presagiar que se avecinan meses difíciles de máxima complejidad para el “león” libertario. La aguda situación de estanflación que impacta directamente sobre la micro economía de cada uno de los argentinos, provocando que los bolsillos cada vez estén más lánguidos y anémicos de billetes.
Tal vez es por eso mismo que la opinión pública comienza a poner en tela de juicio la gestión presidencial, y también, la imagen positiva del máximo mandatario argentino. Solo por citar algunas complicaciones que deberá afrontar y transitar durante los últimos meses de 2024, es lograr revertir los datos estadísticos que demuestran que en el mes de septiembre, ya son varias las consultoras que exponen la caída de la imagen positiva de Milei, entre ellas se encuentra: Opina Argentina, una consultora que en la actualidad es dirigida por Facundo Nejamkis, un ex funcionario K, dado que en 2011 supo ocupar el cargo de secretario de Gabinete de la Nación y que durante la última campaña electoral del 2023, realizó mediciones para Horacio Rodríguez Larreta y también para Martín Lousteau. Pero que, durante muchos meses, fue de las encuestadoras que mejores números le daba al oficialismo.
Desde julio del 2024 venía mostrando algunos números a la baja, pero tenues, dentro del margen de error. Hasta que en su último relevamiento de septiembre apareció una merma de 6 puntos en la aprobación de la gestión (de 47% a 41%).
Los datos del informe se desprenden del enfoque en tres grupos en particular, donde las bajas respecto a agosto fueron mayores: los votantes de Milei en la primera vuelta (la positiva se redujo de 84% a 64%), los habitantes del AMBA (de + 48% a + 39%) y las mujeres (de + 42% a + 35%).
A partir de ahora, el camino enripiado es el que deberá resolver el Poder Ejecutivo Nacional, mientras tanto los argentinos continúan naturalizado la aplicación de los recortes que los inducen a realizar un autoajuste económico en la mayoría de las prácticas de consumo, culturales y en la cotidianidad buscando la manera de ahorrar y de exprimir al máximo hasta el último centavo que les ingresa.
A todo esto, lo que en realidad comienza a subyacer, es la situación de extrema complejidad que se percibe en el humor social que se observa en las calles, dado que ciertos actores políticos: dirigentes partidarios comienzan a expresarse y a exteriorizar el deseo e ilusión de copar las calles, despertando así nuevamente aquella “batalla cultural” con el oficialismo -aquella vieja y conocida disputada-, que nos induce a la pregunta
¿Quién dominará las calles? De esa misma interrogante parten ciertas especulaciones, dado que si nos remitimos a las últimas encuestas que marcan la disminución en cuanto a la imagen positiva y de aprobación de la gestión del actual presidente, Javier Milei, y si a esto último le sumamos el lanzamiento nacional del partido de La Libertad Avanza ¿Hasta dónde está dispuesto el «outsider» a comenzar a pagar el costo político de cada una de sus acciones y decisiones?
Entendiendo que una cosa es enfrentar a la opinión pública sin poseer aspiraciones a renovar el mandato presidencial, pero muy distinto, es hacerlo luego de una clara intencionalidad que demuestra lanzar un armado político en todo el territorio argentino que muestra y evidencia que el presidente ya está pensando en un nuevo mandato y renovar el voto de confianza con los argentinos, tal vez sea con un delfín político del propio espacio político, pero evidentemente el outsider sufrió una mutación: se convirtió en un actor político que pasó a integrar “la casta” que tanto aborreció y denostó durante tanto tiempo.
Diego Salazar…