El abogado y ambientalista Lucas Ortega brindó una exhaustiva explicación sobre el polémico tema de las medidas de control para la especie fornánea introducida en diferentes etapas en el país y que en la vecina provincia de Corrientes ya se convirtió en una plaga. El profesional forma parte de una Asociación Civil que se dedica a informar y defender la “actividad cinegética”.
La actividad cinegética es la actividad o acción en la que se captura o abate un animal en estado salvaje o silvestre, tras su pisteo y persecución. Según el filósofo español José Ortega y Gasset, “la caza es todo lo que se hace antes y después de la muerte del animal”, concepto que retoma el abogado cuando explica la actividad, diferenciándola de la caza deportiva.
“Actividad cinegética de control, es una actividad para reducir y controlar las especies invasoras exóticas; la caza deportiva tiene como objetivo la práctica de la actividad de caza de especies autóctonas en períodos determinados y en cantidades establecidas, precisa Ortega.
La polémica, suscitada tiempo atrás en la región fue recuperada durante una entrevista al ambientalista con Bryan Villalba y Alejandro Chini durante el programa “La última rosca”, por Radio Up 95.5 en la tarde-noche de este último martes.
En la oportunidad, Ortega no eludió los cuestionamientos que reciben como defensores de la actividad reguladora de esta especie de ciervos tipo “Bambi” como fue ampliamente difundido por la industria audiovisual estadounidense a través de películas infantiles y que responde al ciervo tipo “axis”.
Recordó que la problemática de la caza está encarda de manera equívoca en el país, ya que “con la prohibición de la caza mayor de la ley de 1978 y con la prohibición de la caza menor de 2015, los índices demostraron que no se logró disminuir el impacto de la casa furtiva que se lleva adelante en Misiones; la realidad de la provincia demuestra que la prohibición no fue una buena decisión”.
En este sentido, Ortega considera que “la especie del Axis es una buena opción que va a amortiguar esa actividad (la caza furtiva); puede frenar el impacto negativo de la caza furtiva. Entendemos que la mejor forma de erradicar esta práctica es informar, educar y comunicar”.
Explicó que “la actividad cinegética incluye actividad previa y posterior a la muerte del animal, nosotros honramos al animal al consumir esa carne, preparándola de manera especial y se comparte luego en camaradería”.
En otro punto de su explicación casi didáctica, el abogado opinó que “el ADN del ser humano indica que la caza y la pesca es el primer contacto del hombre con la naturaleza, el hombre necesita de todas las especies. No hay duda que esta especie es perjudicial y nocivo para la diversidad”.
La historia de su introducción
Sobre el origen de la introducción de esta especie considerada por varios sectores como negativa para la biodiversidad en Misiones o de cualquier otro ambiente del país, Ortega enumeró: “Es un animal gregario, se mueve en manadas. Aarón Félix Martín de Anchorena Castellanos -un aristócrata argentino que se destacó como aviador pionero en el Río de la Plata y como estanciero en Uruguay- fue quien lo introdujo en América Latina en 1907, en territorio uruguayo en principio. De Uruguay lo pasa a la Argentina, precisamente a la provincia Buenos Aires en el 1931; también lo lleva a la isla Victoria, al sur del continente, donde no se adaptó bien la especie, sí se adaptó mejor el ciervo colorado. Otro antecedente de introducción se produjo en una colonia galesa de Santa Fe, donde también con los mismos fines cinegéticos se introdujo la especie. Después algunos cotos en la provincia de Corrientes; y por supuesto que son gregarios, se mueven, sobre todo en época de reproducción tienen un gran movimiento. Justamente el circuito de acceso a nuestra provincia está con Corrientes, provincia que enfrenta un problema gravísimo, está infestado, y en materia legislativa están por declarar al axis como ‘plaga’. Nosotros tuvimos avistamientos que ingresaron a la zona urbana. Estos avistamientos ya se empezaron a producir en la época de pandemia, en 2020, en la zona de Garupá, se empezaron a ver ejemplares”.
Sobre la Asociación Civil
Ortega comentó que integra la Asociación Civil de Conservación de la Biodiversidad Autóctona de Misiones y Control de Especies Exóticas Invasoras, que se ocupa de informar, educar, comunicar sobre los aspectos diversos de la “actividad cinegética”. “En primer lugar, me toca representar una asociación civil que se encuentra en formación; que tiene como objeto principal la protección de la biodiversidad de la provincia de Misiones y la lucha contra las especies exóticas. A partir de ahí, nosotros ponemos el foco, nuestro objeto de acción radica en la protección de lo nuestro; defendemos lo nuestro ante especies invasoras”.
En el ámbito del que ya formarían parte unos 600 interesados en la actividad cinegética, el tema del ciervo axis se está analizando y abordando desde distintos puntos de vista. Uno de ellos, con el SENASA, porque consideran que se está “frente a una especie que es portadora de enfermedades que son enfermedades zoonóticas; es decir que pueden transmitir del animal al hombre. Son cuatro particularmente las que se conoce que es portador del axis: La brucelosis, la leptospirosis, la neosporosis y la tuberculosis”.
Otra de las problemáticas que planteó respecto de la presencia de esta especie ajena al ambiente misionero, fue el de la pertenencia del ciervo axis “a una de las 14 especies más invasoras a nivel mundial, juntamente con el ciervo colorado, que se encuentra en el sur de la Argentina. Y al no ser nativo, produce un impacto, justamente un impacto adverso. a la biodiversidad de Misiones. Al ser una especie invasora es obvio que por la propia biodiversidad de la provincia de Misiones no hay un depredador nato de estas especies. No existe predador, sepan que el alimento predilecto, el depredador del ciervo axis es el tigre de Bengala. Estamos hablando de un animal, un felino de 250 kilos o más. O sea, el axis no pertenece a nuestro hábitat”.
Proyecto de ley
Finalmente, Ortega compartió algunos puntos que incluyen como asociación en un proyecto de ley que presentarán -esperan que de manera conjunta con el SENASA y el Ministerio de Ecología de la provincia- para declarar al ciervo axis como “plaga” y que pueda permitir la actividad cinegética como forma de control de esa plaga.
Al mismo tiempo, intensificarán las actividades de información, educación y comunicación por todos los medios posibles, para que la población esté enterada del verdadero alcance del daño que produce la especie introducida a la actividad ganadera y agrícola de Misiones.