Intentan determinar si la joven asesinada en Chaco fue víctima de violencia de género por parte de César Sena. Además, un testigo de identidad reservada aportó un teléfono celular que fue encontrado en un descampado.
Los fiscales que investigan la muerte de la joven Cecilia Strzyzowski quieren reconstruir cómo era su relación con César Sena, detenido y acusado de haberla matado el 2 de junio pasado en la casa de su padre y su madre, Emerenciano Sena y Marcela Acuña.
Concretamente, el equipo especial de fiscales intenta saber si la joven sufrió situaciones de violencia de género por parte de su pareja, ya que un testigo de identidad reservada vinculado a Cecilia, aportó días atrás en el expediente una serie de chats entre él y la joven, donde ella le había contado de un episodio de agresión física que sufrió por parte de César el pasado 3 de mayo.
Sobre ese punto es donde quieren profundizar los fiscales y, por ello, entre hoy y mañana van a declarar amigos y allegados de la joven.
En forma paralela, otro testigo de identidad reservada aportó a los fiscales un teléfono celular que dice que podría estar vinculado a los imputados y fue encontrado en un descampado.
Esta semana también se decidirá si hay un octavo imputado debido a que hay un testigo que declaró y se presume de un falso testimonio, sí se lo vincula a una maniobra de presunto encubrimiento del crimen.
También, ya casi todos los imputados, tres por asesinato y cuatro por encubrimiento, apelaron el auto de prisión preventiva y el viernes próximo es posible que se conozca la fecha en la que la Cámara decida escuchar el argumento de las defensas y luego resolver si confirma o no las preventivas.
(Fuente: Época)