Fue indagado por el juez de Instrucción 2 de Oberá, Horacio Alarcón. El hombre se negó a declarar, sin embargo su abogado patrocinante dialogó con este Diario y dio su versión.
El juez de Instrucción 2 de esta ciudad de Oberá imputó por “homicidio culposo” al propietario de los dos perros de la raza pitbull que atacaron y mataron a un expolicía en Campo Viera, señalaron fuentes judiciales.
Durante la audiencia indagatoria, que se concretó el pasado viernes, el acusado se abstuvo de declarar, y debido a que el delito por el cual está sindicado no contempla la cárcel, continuará en libertad supeditado a la causa.
El hecho ocurrió la mañana del pasado miércoles 3 de abril, cuando el suboficial retirado de la Policía de Misiones, Hipólito de Jesús Duarte, de 64 años, perdió la vida tras ser atacado por los dos canes, en un camino de tierra ubicado en el barrio 5 Bocas en Campo Viera.
Al llegar al lugar, los uniformados se encontraron con un cuadro dantesco, el cuerpo de Hipólito yacía en el suelo y los dos pitbulls continuaban mordiéndolo.
Al tratar de intervenir, los funcionarios policiales también fueron atacados por los canes, por lo que debieron ultimar a uno mientras que el otro huyó herido. La víctima no tenía signos vitales, y presentaba múltiples lesiones por mordeduras.
Búsqueda y captura
Dado el peligro que representaba el perro que había escapado tras el ataque (luego se supo que era una hembra), los efectivos lo rastrearon unos 500 metros, hasta que lo encontraron en la casa de su presunto dueño, de 30 años, según se informó en su momento.
El hombre, al ser sindicado como el supuesto dueño de los animales, quedó notificado en forma preventiva por el delito de homicidio culposo, permaneciendo en libertad bajo investigación judicial. Mientras que por orden del juez interviniente, se dispuso la autopsia de la víctima.
“Los perros estaban enajenados, cuando llegó la comisión policial no dejaban a los efectivos bajar del móvil”, relató en su momento el director de Seguridad de la Policía de Misiones, Raúl David Maslowski.
Cuando uno de los efectivos logró bajar del vehículo, los perros intentaron atacarlo también, por lo que tuvo que ultimar a uno de los animales, dándose el otro can a la fuga, presumiblemente asustado por el ruido del disparo.
“Otra patrulla lo persigue por lo que pudimos saber cuál era el domicilio del perro, y se le informó al dueño lo que había pasado”, agregó el jefe policial.
Lo cierto es que, según los vecinos de la zona que hablaron con la fuerza policial, los perros no solían andar sueltos en la calle.
“Suponemos que eran agresivos pero dentro de su propiedad, se habrán escapado en algún momento de descuido del propietario y cometieron este lamentable hecho”, precisó Maslowski a la citada radio.
Actualmente, la perra que fue baleada por los efectivos se encuentra en un canil y bajo cuidados en una veterinaria de Oberá.
Tras la audiencia indagatoria el abogado patrocinante del acusado, Rafael Nuñez, dijo que los perros “no son propiedad de mi cliente y que la citación de la Justicia fue por una declaración de un vecino que dijo que probablemente mi representado es dueño de los perros, pero ese vecino tampoco lo aseguró. Los elementos probatorios que existen en el expediente de la causa no determinan con claridad a quien le pertenecen los perros. Si bien todo es materia de investigación, no hay pruebas determinantes que aseguren que él es propietario de los perros”.
Fuente: Primera Edición