Luego de la difusión de diversas versiones sobre una agresión a un joven dentro del boliche Club Holy, la empresa propietaria del establecimiento, Teyú Emprendimientos SRL, difundió un comunicado oficial en el que se deslindó de la responsabilidad del hecho y aclaró su postura ante la situación.
Según informó la empresa Holy, “el incidente no se produjo dentro del local, sino en la vía pública, y se trató de una situación aislada” que, aseguran, “fue provocada por la propia víctima del hecho”. De acuerdo con el comunicado, todo comenzó cuando, según la empresa, Nicolás Ocampo generó disturbios dentro del boliche, poniendo en riesgo la seguridad de los asistentes. Por tal motivo, fue retirado del lugar por el personal de seguridad, “conforme a los protocolos establecidos y con un accionar proporcional, adecuado y respetuoso”, afirmaron.
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El conflicto, aseguran desde la firma, continuó fuera del establecimiento, cuando el mismo Ocampos habría esperado a uno de los miembros del personal de seguridad con intenciones de agredirlo físicamente. En ese contexto, se habría producido un altercado en la vía pública, en el que el joven debió ser reducido, siempre según la versión del local, “mediante el uso de la fuerza mínima y necesaria hasta la llegada del personal policial interviniente”.
En su descargo, Club Holy insistió en que el hecho fue externo a su control operativo y no se trató de una agresión dentro del boliche, como sostienen algunas publicaciones que circularon en redes sociales. “Reiteramos que el incidente en cuestión no fue consecuencia de un accionar indebido por parte del personal de seguridad”, afirmaron.
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