Ante la creciente inflación en nuestro país, cada vez son menos los brasileños que cruzan a la localidad misionera para realizar compras. La caída en las ventas se replica en la mayoría de ciudades fronterizas tanto con Brasil como con Paraguay.
Después del buen momento que venían registrando los comercios de frontera en Misiones durante los últimos años, actualmente el sector no pasa por un buen momento debido a la crisis económica a la que se enfrenta el país, las variantes cambiarias y el aumento de precio de los productos, eso hace que el consumidor busque más alternativas y en el caso de los consumidores de zonas fronterizas se les facilita aún más porque pueden cruzar la frontera y comprar productos más económicos del otro lado.
En el caso puntual de Bernardo de Irigoyen, en el extremo más oriental del país, en los últimos años y sobre todo después de la pandemia del coronavirus, el sector comercial tuvo un crecimiento importante debido a la desvalorización del peso ante el real.
En consecuencia, los brasileños en gran medida elegían hacer sus compras en los comercios argentinos y en la mayoría de los rubros, lo que hizo que la actividad creciera, se abrieran nuevos comercios y otros se reinventaran o ampliarán sus locales.
Pero la creciente inflación, las variantes cambiarias y nuevos aumentos de precios en todos los productos, hizo que el cliente brasileño compre menos y se especule mucho más.
En cambio, desde fines de diciembre se empezó a notar una suba de argentinos en los comercios de las ciudades limítrofes brasileñas.
Algunos clientes argentinos, consultados por este medio, manifestaron que “aún no es excesiva la diferencia en precios, pero los comestibles ya se pueden comprar en Brasil, incluso productos cárnicos, algunos embutidos, cerdo, pollos, frutas y verduras, entre otros productos de la canasta básica, como azúcar, fideos y arroz”.
Los datos fueron aportados desde la ASCOAGRIN que es la Asociación Comercial y Empresarial de Dionisio Cerqueira y Barracao ciudades brasileñas limítrofes con Bernardo de Irigoyen.
Además, desde la misma entidad comercial manifestaron que durante febrero, y lo que va de marzo, aumentó mucho la venta de prendas de vestir y calzados, sobre todo en la línea infantil relacionándolo con la vuelta a clases.
Este revés no solo preocupa al sector comercial, también preocupa a las autoridades locales.
En este sentido, el intendente local Edgardo Aquino, mencionó que “realmente el comercio local no pasa por un buen momento y lo más preocupante es que quizás en los próximos días veamos el cierre de algunos de ellos”.
“Hoy prácticamente está desolado el pueblo, la concurrencia es muy escasa, la gente está volviendo a comparar a los comercios brasileños porque es más barato allá y aparte, de este lado continúan los aumentos, entonces la situación hace que se ponga crítico el momento, ni pensar cuando empiecen a despedir personal o cerrar comercios. Eso es algo que no queremos que suceda porque agrava aún más la crítica situación económica de nuestra gente”, manifestó.
“Muchos jóvenes y jefes de familias pueden quedarse sin trabajo, además de una baja interesante también en uno de los principales sectores que mueve la economía local que es el comercio, entonces realmente es preocupante la situación”.
(Fuente: El Territorio)