En un nuevo golpe a los bolsillos de los usuarios de Posadas y Garupá, la empresa de servicios de agua SAMSA aplicó un aumento del 20% en las tarifas correspondientes al mes de noviembre. Este incremento se suma a una serie de ajustes a lo largo del año, acumulando un aumento total del 90% en 2023.
La facturación de noviembre reveló que el consumo de agua potable hasta 15 m3 mensuales, común en la mayoría de las viviendas residenciales, alcanzó un valor de $3.105 sin impuestos (equivalente a $4.122 con impuestos incluidos) en la zona de mayor tarifa de Posadas.
El presidente del Ente Provincial Regulador de Agua y Cloaca (EPRAC), Daniel Distéfano, señaló que la tarifa estaba rezagada casi un 60%, destacando que el servicio se ha mantenido gracias al esfuerzo económico de la Provincia, las empresas privadas, las cooperativas y las municipalidades. Distéfano explicó que las decisiones sobre incrementos tarifarios las define el Poder Ejecutivo provincial.
Desde SAMSA defendieron el aumento, destacando las inversiones ejecutadas en colaboración con el Estado provincial para mejorar y expandir los servicios. Afirmaron que, a pesar del contexto inflacionario, estas inversiones han permitido superar problemas estructurales de abastecimiento en lugares como Garupá.
La Federación Misionera de Cooperativas de Agua Potable (FEMICAP) también ha seguido la tendencia de aumentos graduales, ajustando sus tarifas según el índice de inflación publicado por el INDEC desde julio. Miriam Bosch, presidenta de FEMICAP, explicó que las cooperativas deben enfrentar costos en constante aumento, incluyendo salarios, y resaltó las diferencias en la lógica de cobro respecto a empresas como SAMSA, que requieren autorización del EPRAC para aplicar aumentos.