El submarino ARA San Juan (S-42) se hundía hace seis años, un 15 de noviembre de 2017, en las profundidades del Atlántico sur como consecuencia de una serie de desperfectos técnicos que desencadenaron una tragedia en la que murieron sus 44 tripulantes, cuyo recuerdo es honrado por sus familiares en un reclamo de justicia que no cesa.
La confirmación de su desaparición y la búsqueda del navío contó con la participación solidaria de efectivos de marina de las mayores potencias del mundo, así como de expertos de búsqueda nacionales e internacionales y equipamiento de última generación, lo que transformó a Comodoro Rivadavia en el mayor centro operativo conjunto de la historia nacional.
El sumergible fue construido a principios de la década de 1980 en el astillero alemán Thyssen Nordseewerke y contaba con 65 metros de eslora -el largo del buque-, un diámetro de casco resistente de siete metros y era propulsado por cuatro motores diésel MTU 16 V de 6720 HP.
Eliana Krawczyk, la única mujer a bordo del submarino argentino ARA San Juan
Eliana María Krawczyk, la primera submarinista en obtener el cargo de oficial de la historia argentina, era la mujer integrante de la dotación de 44 marinos del ARA San Juan.
Krawczyk, de 34 años, había estudiado Ingeniería Industrial en Oberá. Sin embargo, en un momento decidió abandonar la carrera para entrar a la Armada. En 2003 rindió el ingreso a la Escuela Naval Militar, le fue bien y en 2004 ya estaba integrada en la que sería la promoción Nº 137.
Cuando llegó a Mar del Plata, cuna de los submarinos, tuvo una atracción fuerte por ellos. Quería formar parte de esa tripulación. Parecía un deseo difícil de cumplir: en sus 71 años de historia, la fuerza nunca había incorporado mujeres en sus filas. Egresó en 2008 y ese año, hizo su viaje de instrucción a bordo de la fragata Libertad.
Tras esa travesía de ocho meses se convenció de anotarse en el curso de submarinos y buceo de Mar del Plata. Así fue como se convirtió en una pionera en la actividad.
Soltera y sin hijos, dedicó su vida a defender el mar argentino.: «Mi vocación por el mar y por la Armada nació con una publicidad, cuando estaba en Misiones en el año 2003. La vi por internet y me interesó, así que fui a la delegación en Posadas, me inscribí, y en 2004 ingresé. Cuando fui al submarino me gustó, me llamó mucho la atención y ahí decidí que iba a ser submarinista, y aparte quería ser la primera mujer», contó meses antes de la tragedia.
Eliana además explicó: «Me especialicé en armas submarinas, y en 2012 pude hacer el curso de submarinista, y embarqué cuatro años en el submarino ARA Salta, y este es mi primer año en el ARA San Juan».
La suboficial sentía pasión por su profesión. De Argentina y Sudamérica era la primera mujer submarinista.
Cuando le consultaron qué sentía ser la única mujer abordo detalló: «Lo viví siempre bien, y siempre me gustó. No tuve ningún freno ni intervención de nadie, y nunca tuve ningún problema. Duermo con dos compañeros en el mismo camarote. Soy la única mujer abordo y me siento bien, contenta y feliz».
Cuando se recibió de submarinista, su padre Eduardo Krawczyk, la bautizó “la reina de los mares”.
Desde el día en que el submarino perdió todo tipo de contacto, la intranquilidad se apoderó de la familia. «Yo me levanto antes de las 6 para rezar el Rosario y pedir por ella y toda mi familia. Mi hijo estaba con internet cuando apareció la noticia «, se conmovía su padre quien, por esos días, no perdía las esperanzas.
«Ella sola se hace querer. Ella ve un perro abandonado, lo recoge y lo lleva al veterinario, lo cura. Es de un corazón inmenso, además del coraje que tiene», relató su progenitor.
“Soy la responsable de lanzar torpedos, entonces hay que prepararse continuamente para ejercitarnos”, había relatado de su vida a bordo del ARA San Juan
«Varios días antes, cuando estaban en Ushuaia, ella nos contó que tenían problemas. Pero ella persiguió su sueño. El amor de ella era el mar», expresó Roberto Krawczyk, hermano de Eliana María.
«Todos me preguntan si me asustan los submarinos. Y no. Para mí son impresionantes, algo intrigante y emocionante. Es otra vida. Está la misma camaradería que en un buque pero hay lazos de unión más intensos en la dotación», señaló Eliana en una entrevista a medios nacionales.
(Fuente: Infobae)