La provincia de Misiones se encuentra en alerta ante la falta de lluvias y el elevado índice de incendios, debido a las condiciones climáticas actuales, que han elevado la peligrosidad de incendios al nivel extremo en gran parte del territorio.
Según el mapa actualizado por la Subsecretaría de Ordenamiento Territorial y la Dirección General de Alerta Temprana, casi todas las regiones de la provincia están marcadas en rojo, indicando un riesgo máximo, salvo Iguazú, que se encuentra en amarillo (riesgo moderado) y General Manuel Belgrano, en naranja (muy alto).
Esta situación refleja la severidad de las condiciones climáticas, caracterizadas por altas temperaturas y la persistente falta de lluvias. Las autoridades provinciales, reiteraron la importancia de evitar cualquier tipo de quema, ya que podría generar un desastre ambiental de grandes proporciones.
El índice extremo de peligro de incendios abarca municipios claves como Posadas, Oberá, Eldorado, Apóstoles y San Pedro, entre otros. Estas áreas enfrentan un riesgo elevado de propagación del fuego, lo que representa una amenaza tanto para la biodiversidad local como para las comunidades.
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Algunas recomendaciones para la población en general:
- Abstenerse de realizar quemas de basura o pastizales.
- Evitar actividades que puedan generar chispas o combustión en zonas rurales.
- Denunciar de inmediato cualquier indicio de incendio llamando al 911.
- Esfuerzos conjuntos y trabajo preventivo
Las brigadas del Plan Provincial de Manejo del Fuego están en estado de alerta máxima, utilizando tanto medios terrestres como aéreos para monitorear y controlar posibles focos. Además, se ha reforzado la vigilancia en áreas cercanas a reservas naturales y parques provinciales, que hasta el momento no han registrado incendios.
El director del Plan Provincial de Manejo del Fuego, Luis Chemes, recordó en diálogo con los medios durante la semana que “la mayoría de los incendios tienen origen humano. Si nadie prende fuego, no hay incendios forestales ni rurales”. Asimismo, instó a la población a tomar conciencia sobre el daño irreparable que los incendios provocan en el ecosistema misionero.