Tras la reunión con el gobierno misionero, y en medio de la tensión en el sector yerbatero, Ángel Oseñuk, integrante de la Mesa Yerbatera, expresó su preocupación por la falta de avances en las negociaciones y denunció serias irregularidades que perjudican a los productores.
En diálogo con “El País de la Libertad” de Radio Up 95.5, Oseñuk detalló las dificultades de participar en una mesa de trabajo donde no fueron plenamente integrados. “Hace un mes nos dijeron que nos invitaban, pero luego nos quisieron recibir a solo dos integrantes. Por eso no participamos antes”, explicó.
Con el paso del tiempo y el endurecimiento del paro, decidieron sumarse para buscar una solución. “Ayer acompañamos con la esperanza de descongestionar esta situación que venía trayendo mal humor en la gente”, señaló.
Sin embargo, advirtió sobre el descontento por la falta de resultados concretos. “Hoy tenemos un gobierno provincial realmente ausente y un instituto de la yerba mate que no tiene facultades para laudar un precio justo”, criticó.
Precios que no cierran
El principal reclamo de los productores es la falta de un precio justo para la hoja verde. “Nosotros pedíamos $370, pero no lo logramos. Imagínese llegar a $450”, sostuvo. Según el cálculo del Ministerio del Agro, ese valor se sustenta en un costo de producción de $422 más un pequeño margen de ganancia.
Sin embargo, el panorama actual es desolador. “Hoy nos están pagando entre $180 y $200, y al productor le dan $100 en efectivo. El resto lo liquidan con cheques a 30, 60 y 90 días. Es imposible trabajar de esta manera”, denunció Oseñuk.
A esto se suma la denuncia contra el accionar de los secaderos y cooperativas: “Se pusieron de acuerdo con la industria para matar al productor. De un día para el otro pasaron de pagar $400 a $180”, afirmó con indignación.
Falta de apoyo y movilización
Por otra parte, Oseñuk se mostró decepcionado por la escasa participación en el paro yerbatero: “Nosotros teníamos que ser no menos de 5.000 productores en la ruta. Salimos a hacer un reclamo justo, pero entre San Pedro, San Vicente y Aristóbulo del Valle éramos 500 personas. Parece que a la gente no le interesa”, lamentó.
Frente a esta situación, insistió en que el paro continúa en un compás de espera hasta la próxima reunión, pero advirtió: “Si no hay respuestas para el 6 de enero, no se permitirá el tránsito de hoja verde ni yerba canchada si no pagan los $450 firmados ayer”.
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Diferencias impositivas entre provincias
Otro punto clave en el conflicto es la diferencia de costos entre Misiones y Corrientes. “Misiones tiene entre un 7 y un 8% más de impuestos que Corrientes. Estamos en desventaja para competir en el mundo”, subrayó.
Para Oseñuk, la solución pasa por incentivar la exportación: “Hay que darle beneficios a las cooperativas y secaderos que exporten, como menor carga impositiva. Sin eso, no tenemos un mercado competitivo”, explicó.
El rol del Estado
Sobre la participación estatal en el sector, Oseñuk consideró que “el Estado siempre tiene que estar presente con una política agraria seria a largo plazo”. Sin embargo, cuestionó la falta de coherencia en las medidas: “Hoy plantamos yerba y tardamos cinco años en cosecharla, pero no hay un plan sólido para manejar la producción ni garantizar precios justos”, criticó.
Por último, lanzó un ultimátum sobre la mesa de negociación que liderará el gobernador: “Si esto es un circo y no un trabajo serio, voy a dar un paso al costado. No me voy a involucrar en algo que desarme nuestra fuerza como productores”, concluyó.
