En el marco del Día Internacional para la Prevención del Abuso Sexual contra Niñas, Niños y Adolescentes, los datos expuestos por el Dr. Fabián Oudín, secretario de Acceso a la Justicia de Misiones, arrojaron luz sobre una realidad alarmante: en lo que va de 2024, los casos de abuso sexual infantil en la provincia ya superaron la cifra total del año pasado.
“De los 1.100 casos de violencia atendidos este año, 215 involucraron a niñas, niños y adolescentes, y de esos, 161 fueron de abuso sexual”, detalló Oudín, en diálogo con “El País de la Libertad” de Radio Up 95.5. Una cifra escalofriante que evidencia la magnitud del problema en la región.
El entorno familiar, un factor predominante
Según Oudín, el 80% de los casos de abuso sexual contra menores se produce en el núcleo familiar o en el círculo cercano de la víctima. “Son situaciones que muchas veces quedan solapadas y ocultas porque las víctimas están en un entorno de confianza o dependencia, lo que dificulta que estos hechos salgan a la luz”, señaló.
Los agresores incluyen familiares directos, vecinos e incluso personas vinculadas al cuidado de los menores, como docentes o cuidadores. Sin embargo, los casos más recurrentes se presentan dentro del ámbito doméstico, un espacio que debería ser de seguridad para los niños.
El Poder Judicial de Misiones, bajo la disposición del Procurador General, trabaja para garantizar una atención inmediata y personalizada a las víctimas. “Nuestra intervención se activa una vez que tomamos conocimiento de los casos, ya sea por informes de jueces y fiscales, o directamente por denuncias de las víctimas o sus responsables”, explicó Oudín.
A su vez, la provincia cuenta con un equipo interdisciplinario compuesto por psicólogos, médicos y otros profesionales que se encargan de abordar estas situaciones. Además, se implementó la línea “Contame”, un servicio que permite a las víctimas o testigos denunciar o pedir orientación a través de WhatsApp.
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Datos preocupantes y distribución geográfica
Si bien el abuso infantil es un problema global, en Misiones las zonas norte, como San Pedro y San Vicente, presentan un mayor número de denuncias. “Lamentablemente, en estas áreas también encontramos otros factores de vulnerabilidad social que contribuyen a la revictimización de los niños”, agregó el funcionario.
A pesar de los desafíos, Oudín subrayó que en la mayoría de los casos de abuso infantil se logra llegar al juicio oral en un plazo promedio de un año, gracias al compromiso y celeridad de los jueces. “Lo más importante es proteger a las víctimas y garantizar que los agresores sean detenidos de forma inmediata”, enfatizó.
El abuso sexual contra niñas, niños y adolescentes es una problemática que requiere un abordaje integral y continuo. Desde la Secretaría de Acceso a la Justicia y el Poder Judicial se trabaja no solo en la asistencia a las víctimas, sino también en la prevención y en la sensibilización de la sociedad sobre este flagelo.
“La protección de nuestros niños y la certeza de que los agresores serán detenidos son aspectos fundamentales para devolverles la tranquilidad a las víctimas y sus familias”, concluyó Oudín.
