Desde hace varios días que la provincia de Misiones se encuentra con riesgo de incendios que van desde el moderado a alto según las zonas. Esta situación perdurará hasta el domingo 17 de noviembre por la tarde, cuando las lluvias lleguen a la tierra colorada.
Según el mapa de riesgo que comparte a diario la Dirección de Alerta Temprana, en los departamentos Capital, Apóstoles, Concepción, Leandro N. Alem, Candelaria, San Ignacio y Oberá, el riesgo es muy alto, mientras que para los departamentos de 25 de Mayo, Cainguás, San Martín, Guaraní, Montecarlo, San Pedro, Eldorado e Iguazú el riesgo es alto. Por último, el único que tiene un estatus de moderado es General Manuel Belgrano.
En ese sentido, es conveniente evitar cualquier generación de fuego que pueda salirse de control y provocar focos que después cuesten apagar. En ese sentido, las medidas a tomar para prevenir los incendios forestales son no arrojar colillas de cigarrillos ni otros objetos encendidos al suelo, no realizar quema de residuos ni fogatas, mantener limpia la vegetación alrededor de las viviendas.
“Esto va a continuar hasta el domingo a la tarde, luego comenzará a influir un frente frío, afectando primero el Sur de la provincia con chaparrones y, el lunes por la tarde con lluvias y tormentas dispersas por toda la provincia”, sostuvo Daniel Fernández Catá, titular de la dirección.
Cabe destacar que un incendio descontrolado puede llevar a lamentar pérdidas materiales en viviendas y por ello también hay que prestar debida atención al revisar y mantener adecuadamente la instalación eléctrica, no conectar varios aparatos de gran consumo a un prolongador eléctrico y supervisar los fuegos en la cocina. Las quemas para rozados, limpiezas de terrenos y quema de basuras también son potencialmente riesgosos por estos días.
“Hasta el domingo (por mañana) conviene tener cuidado. Los índices no sólo toman en cuenta la meteorología sino también el estado de la vegetación. Cuando están alto o muy alto, nos están diciendo que la vegetación está en situación de vulnerabilidad ante el fuego y en caso de ocurrir incendios sería difícil controlarlos”, explicó Fernández Catá.