La selección Española le ganó a Inglaterra (1-0) con un gol de Olga Carmona y se proclamó campeona del mundo en la que ya es la mayor gesta de siempre del deporte femenino español.
España es campeona del mundo, la epopeya que más necesitaba el deporte femenino español, que ha escrito el capítulo más trascendente de su historia en el Mundial disputado en Australia y Nueva Zelanda. Un golazo de Olga Carmona en la primera mitad fue suficiente para derrotar a la poderosa Inglaterra (1-0) y estampar la primera estrella en la camiseta.
El triunfo de la selección corona una gesta sin precedentes que cambiará para siempre la dimensión del deporte femenino en España, enganchada como nunca a un evento que ha sacado a miles de personas a la calle y ha congregado a millones delante del televisor.
Vilda tenía claro que la estrella pasaba por una batalla táctica, por ganarle la partida en la pizarra a Sarina Wiegman, prácticamente inmaculada desde que asumió el banquillo de Inglaterra: campeonas de Europa el año pasado y 35 victorias en 36 partidos hasta esta final.
El técnico mantuvo el bloque que le llevó desde los octavos hasta Sídney con un único cambio respecto a las semifinales: la revelación Salma entraba en lugar de Alexia Putellas, incapaz de encontrar su mejor forma en el torneo. Wiegman, por su parte, se guardó a la joven promesa Lauren James, que estaba de vuelta tras perderse los cuartos y la semifinal por sanción, y salió con Tone junto a Russo y Hemp en el ataque.