Se trata de los cuatro diputados nacionales que votaron a favor de la ley que reforma previsional en junio y se reunieron con el presidente Milei la semana pasada, antes de cambiar su voto y blindar el veto presidencial contra la norma que mejoraba en $15 mil, las jubilaciones y pensiones. Revés para el Comité Provincia de la UCR y para los dirigentes que avalaron el “giro” de Arjol hacia La Libertad Avanza.
Este lunes, el directorio de la Convención Nacional de la Unión Cívica Radical, el órgano “legislativo” del centenario partido que preside Gastón Manes, decidió suspender las afiliaciones de los cuatro diputados nacionales que habían votado a favor de la ley de movilidad jubilatoria (que impulsó la UCR en el Congreso) y el martes pasado se reunieron con el presidente Javier Milei en la Casa Rosada y horas después, votaron para blindar el veto contra la norma.
Esta medida significa que el diputado por Misiones Martín Arjol, está suspendido, lo que representa un revés para él y para los dirigentes de la UCR que avalaron el giro hacia el oficialismo libertario, entre ellos, el presidente del Comité Provincia del partido, Rodrigo De Arrechea. Entre los que defendieron, o por lo menos, se mostraron en contra de la expulsión del diputado sospechado de haber vendido su voto, puede mencionarse al exdiputado nacional Luis Pastori y al diputado provincial Ariel “Pepe” Pianesi, entre otros.
El propio Manes había anticipado en una entrevista radial, que el consejo directivo de la Convención, integrado por 15 miembros, iba a reunirse este lunes, para impulsar las denuncias contra los cuatro “conversos” ante el Tribunal de Disciplina y, en paralelo, suspender la afiliación hasta tanto se pronuncie ese tribunal. Y remarcó que se procede contra cuatro diputados y no contra todos los radicales que no votaron en contra del veto, porque estos –además de Arjol, los legisladores Mariano Campero (Tucumán), Luis Picat (Córdoba) y Pablo Cervi (Neuquén)– representan a provincias que no están gobernadas por el radicalismo.
En consecuencia, el cambio de voto de los cuatro mencionados, no tiene que ver con un pedido de un gobernador para conseguir obras y mantener una buena relación con la Casa Rosada, para el bienestar de sus ciudadanos.
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De acuerdo con La Nación, la mesa de conducción de la Convención Nacional, encabezada por Manes y el secretario general, Hernán Rossi, decidió elevar los casos de los legisladores al Tribunal Nacional de Ética del radicalismo, para que analice sus casos. En caso de encontrarlos culpables de inconducta, Arjol, Cervi, Picat y Campero podrían ser desafiliados.
El órgano partidario tomó la determinación en virtud del artículo 53 de la carta orgánica partidaria que lo faculta para denunciar “fallas en la conducta de los afiliados y dirigentes partidarios de todos los distritos cando por su investidura lesionen la dignidad del partido”. En tanto, la mesa ejecutiva de la Convención también puso a análisis del tribunal disciplinario los casos de los diputados Roxana Reyes (Santa Cruz) y Gerardo Cipollini (Chaco) para ver si sus conductas (se ausentaron a la sesión) encuadran también en el artículo 53 de la carta orgánica de la UCR. Estos dos, no se reunieron con Milei ni se tomaron fotos en la Casa Rosada.
Por otra parte, el tercer punto de la resolución adoptada esta tarde insta a las autoridades del partido, a los jefes de bloque legislativos y a los gobernadores a conformar una mesa de diálogo con el objetivo de “evitar que se repitan” situaciones como la que protagonizaron los diputados nacionales que votaron a favor de un proyecto del bloque, lo defendieron públicamente y terminaron dándose vuelta, al momento de votar a favor o en contra del veto presidencial.
Según fuentes del citado diario, la suspensión de la afiliación se tomó por 10 votos a favor y la oposición de los representantes de Mendoza y Misiones. En tanto, la decisión de darle curso al tribunal de ética para que analice los casos de los seis legisladores, fue adoptada por 11 votos y la oposición del mendocino Andrés Lombardi, que responde al gobernador de la provincia cuyana, Alfredo Cornejo.
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Respecto de la suspensión de Arjol, Cervi, Picat y Campero, que podría desembocar en la desafiliación de los diputados, Gastón Manes argumentó en una entrevista radial: “pienso que es grave lo que pasó, muy grave. Y siento que a veces la unidad por la unidad misma no tiene sentido, si se va a trabajar una ley, insisto, y cuatro diputados van a darse vuelta y van a ir a hablar con el presidente”, dijo.
“Para mí es muy interesante el dato, porque yo esto lo discutí incluso con los gobernadores radicales, no ahora sino en estos últimos meses, el conflicto que tiene el partido por ser un partido nacional y estamos en un país federal. Entonces los gobernadores con buen criterio y obviamente tienen que gestionar su provincia, necesitan tener una relación con el gobierno nacional de ida y vuelta en cuanto a negociaciones, conversaciones, acerca de políticas públicas. Eso hacía veces que tenga ellos que. sugerir o interpretar que una propuesta del gobierno en el Congreso, debe ser acompañado por los legisladores de la provincia en cuestión”, detalló Manes.
“Lo curioso de este caso es que los diputados que estamos hablando no representan ninguna provincia que es gobernada por el radicalismo, con lo cual muestra que acá no hay ningún tipo de negociación política buscando el bien público. Porque yo entiendo que un gobernador quiere hacer una escuela, necesita fondos nacionales, y acepte negociar y aprobar una ley que por ahí no le gusta tanto, pero es parte del sistema del diseño institucional que tenemos”, puntualizó el titular de la Convención Nacional de la UCR.
En cambio, en el caso de Arjol, Campero, Picat y Cervi, “estos diputados se dieron vuelta, y se fueron solos, porque se les ocurrió. No representan ninguna provincia en términos de gobierno, y lo que habían firmado con una mano, lo borraron con el codo. Encima, si uno ve los discursos que dieron en el Congreso, realmente llama la atención la saña y cómo lo hicieron. Si un partido deja pasar esto, hay que repensar a un partido político”, reflexionó Manes.
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En cuanto a la situación del diputado nacional por Corrientes Tournier, Manes explicó que está en el bloque radical, pero no es afiliado a la UCR, sino que ingresó en reemplazo de un diputado que dejó su banca para asumir como ministro del gabinete del gobernador Gustavo Valdés. “Después hay otros diputados que también se abstuvieron (Reyes, Cipollini), que se abstuvieron pero ya me parece que el caso es diferente”, añadió.
Las sanciones caben para los cuatro “que fueron a verlo a Milei y salieron a pregonar su voto de manera distinta a como lo habían hecho un par de meses antes”.
Consultado por las críticas del ministro de defensa Luis Petri, también afiliado a la UCR, que opinó que el partido “no tiene dueños” y “que no tenían derecho a expulsar a estos diputados radicales votados por los ciudadanos”, Manes replicó de forma contundente, recordándole que la UCR tiene una carta orgánica que debe cumplirse. “Coincido que un partido político no tiene dueños, pero tiene una carta orgánica. Y le recomiendo a Petri que la lea, porque si la lee se va a dar cuenta de lo que estamos diciendo. Incluso la carta orgánica es mucho más dura de que lo que entiendo se va a terminar resolviendo los cuerpos orgánicos, porque la Carta Orgánica habla de que debieran renunciar a la banca incluso, si son sancionados. Cosa que no va a suceder”, aclaró.
“Petri es un dirigente importante, lo que pasa es que puede estar equivocado también”, sentenció Manes.
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Por otra parte, Manes fue consultado sobre la cuestión del voto dividido en los bloques de la UCR en el Senado y Diputados, es decir, el disenso en las votaciones, que es el argumento que emplearon dirigentes radicales misioneros, que avalan la “conversión” de Arjol, como el presidente del Comité provincial, Rodrigo De Arrechea, entre otros.
Ante esto, el presidente de la convención explicó que “no genera ningún tipo de sanción” el voto dividido –es decir que el bloque vote mayoritariamente en un sentido y algunos legisladores radicales en otro–, lo que ya ha sucedido con la Ley Bases y con la declaración de la Educación como Servicio Esencial. “Obviamente un partido de acumulación social, como es el partido radical, grande, en circunstancias como esta, obviamente hay miradas diferentes frente a proyectos de ley que presenta, por ejemplo el poder ejecutivo, hay legisladores que hacen hincapié en la gobernabilidad, otros más en la doctrina, pero todos dentro del marco del juego democrático y entendiendo que hay una sana crítica, en el análisis de la cuestión”.
“Ahora, en este caso particular insisto es un proyecto de ley del Partido Radical que votaron los 35 diputados radicales del bloque. Se trabajó mucho en la comisión, se discutió, fue un gran esfuerzo de todos los diputados lograr los consensos de otros partidos para que acompañen el dictamen del Partido Radical, etcétera. Se logra dos tercios, que es una cosa muy difícil de lograr, se votan las ambas cámaras y el presidente lo veta. Y cuando estaba todo indicado, que se podía ratificar esta ley por insistir que la Cámara de Origen como lo prevé la Constitución, al darse vuelta a estos diputados hacen caer el proyecto”, subrayó Manes, diferenciando los votos disidentes, del cambio de voto de Arjol y compañía.
Al respecto, Manes detalló que “generalmente hay negociaciones (políticas). Lo que se filtró por parte del gobierno, es que le habrían ofrecido como ser parte de La Libertad Avanza o algo así. Pero de todas maneras eso no tiene por qué interesarnos. Nos interesa la inconducta que clara, manifiesta. Un partido político es la base también de la democracia, nosotros vivimos en una democracia de partidos. Puede ser que no nos guste pero hay que reformar la Constitución, que expresamente establece la democracia de partidos”, recordó. “Un partido político no es una patente de corso para que cualquiera haga lo que quiera, si es un partido tiene que tener un cierto eje doctrinal e ideológico, una cierta comunidad de ideas, que en este caso había plasmado claramente”, sentenció el titular de la Convención Radical, explicando por qué corresponden las sanciones contra Arjol y los otros tres diputados radicales que se reunieron con Milei, antes de blindar el veto a la reforma previsional.
