La famosa tormenta “Santa Rosa” es un evento meteorológico significativo que afectará el centro de Argentina a finales de agosto. En Misiones solamente tendremos lluvias aisladas durante el fin de semana.
El ingeniero Daniel Fernández Catá, titular de la Dirección de Alerta Temprana, en diálogo con Radio Up 95.5 “Si pensamos en la Tormenta de Santa Rosa, pensamos en grandes temporales, en una clase de tormenta fuerte, eso se daría este viernes 30 en CABA y norte de la provincia de BsAs, sur de Córdoba y sur Santa Fe, Entre Ríos y oeste del Uruguay, a raíz de la generación de una región de baja presión atmosférica”.
Al ser consultado sobre como se generan las grandes tormentas, Fernández Catá expresó “a partir del choque de masas de aire, una cálida y otra fría, se darían fenómenos de lluvia intensa, rayos, ráfagas, es decir condiciones de tiempo muy adversas”.
Además alertó “en la continuidad, el desplazamiento de la masa de aire frío se daría hacia el noreste, alcanzando nuestra provincia el 31 de agosto, pero provocando fenómenos mucho más débiles como lluvias aisladas y algunos chaparrones con descargas eléctricas, probablemente en la tarde del sábado y hasta la mañana del domingo 1ero de septiembre. Hasta el momento, se esperan precipitaciones de pocos milímetros”.
En relación a las bajas temperaturas, el ingeniero de Alerta Temprana expresó “El desplazamiento de ese frente frío sobre la provincia traerá lógicamente un descenso de temperaturas, hasta el sábado se prevé máximas sobrepasando los 30° y posteriormente tendremos, entre domingo y el martes, mañanas frescas con mínimas entre 8 y 11°, y tardes templadas. Quizá el lunes llegue a 7° para el interior de la provincia”.
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¿Por qué se llama así y cuál es su historia?
La tormenta está estrechamente conectada con la festividad católica de Santa Rosa de Lima, Patrona de América.
La leyenda cuanta que fueron los poderes Isabel Flores de Oliva, nombre de nacimiento de la Santa Rosa de Lima, fueron los que frenaron un desembarco pirata en la ciudad peruana de Lima al generar una fuerte tormenta en el siglo XII.
Aunque los más escépticos sostienen que los corsarios en realidad no atacaron la ahora capital de Perú por la muerte del capitán del navío. Esta teoría también fue relativizada por los meteorólogos, quienes advierte que no tiene la regularidad que la cultura popular le atribuye.
De todas formas, el boca a boca fue más fuerte y la creencia se expandió por todos los dominios españoles durante la etapa colonial y consiguió una significativa penetración en las zonas en el Río de la Plata, Córdoba y Cuyo. De hecho, la capital de La Pampa lleva su nombre y es una de las zonas donde más tormentas fuertes se registran
