El equipo femenino de futsal de Bartolomé Mitre ha logrado un hito importante en su corta pero intensa trayectoria. Luego de un arduo y competitivo torneo, las jugadoras del Mitre Azul se coronaron campeonas en la categoría C15 de la Asociación Posadeña de Fútbol de Salón (APoFuSa), mientras que el Mitre Amarillo se ubicó en el cuarto puesto.
Tras la final del sábado, las integrantes del equipo, junto a su entrenadora, visitaron los estudios de Radio Up 95.5 durante el programa “Cabina Deportiva”, donde compartieron sus reflexiones sobre el torneo y el estado actual del futsal femenino en el club.
“Estamos bien y felices”, afirmó Delfina, una de las jugadoras clave del equipo, quien destacó la dureza del partido final, pero también el espíritu de superación que las llevó al título. “Nos dimos cuenta de que crecimos y aprendimos en el proceso”, añadió Antonella, otra de las protagonistas del equipo.
La profesora Victoria, una de las entrenadoras del club, subrayó la importancia de este torneo, que fue el primero en la categoría sub-15 para el futsal femenino. “Antes no había competencia para las chicas en juveniles o infantiles. Ahora, estamos motivados para seguir aprendiendo y acompañarlas en su crecimiento”, comentó con entusiasmo.
El camino hacia este logro no fue fácil. La organización de los equipos y la preparación para el torneo requirieron años de esfuerzo y dedicación. “Este proceso viene de hace muchos años. En 2020 empezamos con las categorías juveniles e infantiles, y hoy en el club hay alrededor de setenta chicas en inferiores”, explicó la profesora, resaltando la labor de Karina Domínguez, una jugadora con amplia trayectoria y entrenadora experta en futsal.
Karina, según Victoria, ha sido fundamental en el desarrollo de las jóvenes jugadoras. “Ella tiene muchísimas herramientas que las chicas han adquirido y que seguramente les servirán para el futuro”, agregó.
El sentido de pertenencia y la pasión por el club son aspectos que han marcado la diferencia en Bartolomé Mitre. “Nuestra idea es seguir compitiendo, seguir creciendo y poder clasificar nuevamente al Federal. Eso es nuestro objetivo y nuestro sueño”, expresó Victoria.
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El amor por el fútbol también se refleja en las historias personales de las jugadoras. “Desde muy chica me gustaba el fútbol, empecé a los cuatro años en Mitre jugando mixto y después volví al femenino”, contó Maitena, quien además es arquera del equipo. Delfina, por su parte, recordó cómo empezó a jugar al fútbol en una escuelita, dejó un tiempo y luego volvió para unirse al equipo femenino de Mitre.
El torneo C15 no solo fue una experiencia de competición, sino también una oportunidad de aprendizaje y crecimiento. “Las chicas arrancaron como que era algo todo nuevo”, comentó la profesora Victoria, señalando que al principio hubo derrotas, pero con el tiempo y el entrenamiento, las jugadoras empezaron a ver su progreso. “Al final ellas mismas decían: ‘Arrancamos perdiendo contra este equipo y en la final les ganamos’. Eso demuestra la importancia del entrenamiento y del acompañamiento de los padres”.
El apoyo de las familias ha sido crucial en este camino. “Los padres fueron fundamentales. Las chicas jugaban sábado y domingo entre las 10 y la 1 del mediodía, y los padres sacrificaron sus asados y salidas para estar ahí acompañándolas”, destacó Victoria.
A pesar de las dificultades, incluyendo lesiones y momentos de tensión durante los partidos, el equipo de Bartolomé Mitre mostró su determinación y unidad. “El partido de la final estuvo durísimo, tuvimos hasta una jugadora en el hospital, así que fue complicado”, recordó una de las jugadoras.
Ahora, el equipo se prepara para nuevos desafíos, incluyendo la transición al fútbol 11 para participar en la Liga y en los Juegos Evita. “Es un desafío diferente, pero estamos listas para afrontarlo”, concluyó Victoria.