Así lo manifestó Susana Pintos, madre del soldado Ramírez, en diálogo con Radio Up 95.5. En el marco del aniversario número 21° del fallecimiento del soldado, Pintos se refirió a la continuidad de la causa con la cual busca esclarecer los momentos finales de su hijo.
En este sentido, dialogó con este medio y comentó que “tratamos de seguir en este camino de reclamo, dando a conocer y manteniendo viva la memoria de mi hijo y solicitando a las autoridades judiciales que aceleren este proceso judicial que lleva 21 años para que se esclarezca su muerte”.
Vale recordar que el soldado Ramírez falleció en el año 2003, en circunstancias que aún no fueron del todo determinadas.
Según explicó Pintos, “el caso fue archivado y desarchivado varias veces. La última vez fue en el 2016 y ahora la defensa la está llevando adelante el doctor Gabriel Darío Jarque, de Bahía Blanca, que está a cargo de la investigación”.
“Ayer justamente hizo una presentación, sumando fuertes fundamentos, y entre ellas, descartando de plano el suicidio que había instalado el Ejército en un principio y que la justicia quiere mantener hasta el día de hoy”, destacó la madre de Ramírez.
“Con todas las pruebas que hay en el expediente y con todas las testimoniales que tenemos, podemos afirmar hasta el día de hoy que Mauro estaba en el mejor momento de su vida, tenía bien claro lo que quería, laboralmente y sentimentalmente ya que estaba a punto de casarse”, relató.
Además, Pintos remarcó que “el constante pedido de justicia y visibilizar lo que le pasó a mi hijo es lo que me mantiene firme para que no vuelva a suceder”.
“Yo a mi hijo no lo voy a volver a tener, pero hay muchos jóvenes con el mismo sueño, con los mismos proyectos que mi Mauro, y eso es lo que trato de conservar”, manifestó Pintos.
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En esta línea, enfatizó que “hay que protegerlos, aun dentro de las fuerzas armadas, porque también allí hay peligro. Asó como hay gente muy buena que los guía, hay también personas absolutamente perversas, donde exceden en los ejercicios y en los adiestramientos que le deben dar a los soldados”.
“Yo no estoy en contra de que se haga la carrera militar, de los trabajos que deben hacer los soldados, pero los excesos son lo que hay que evitar. Hay que desterrar la violencia institucional de las fuerzas armadas”, apuntó.
Respecto a los involucrados, Pintos apuntó que “hay un pedido de llamada indagatoria desde el año 2017 a dos personas que estuvieron en el momento justo en el que sucedieron los hechos y que hasta el día de hoy el juez no da lugar”.
“El llamar indagatoria no significa que vayan presos, ellos siguen teniendo sus derechos, van a tener sus defensores, pero la causa de mi hijo no debe quedar impune”, explicó Pintos.
“Acá murió un soldado argentino, un chico con vocación, un joven que no es de Apóstoles, pero sí es de la República Argentina y es de la provincia del Chaco. Él estaba solo, no tenía a su familia, pero vino con un sueño que cumplir, vino a trabajar, vino a estudiar y le truncaron al sueño”, resaltó.
“Esas dos personas tienen que comparecer, tienen que ser llamados y tienen que haber culpables en este aberrante asesinato que cometieron con mi hijo. A él lo mataron, destruyeron una familia, pero hoy reclamo por los que están vivos”, completó.
