Falleció en Córdoba la mujer oriunda de Misiones intoxicada con éxtasis durante una fiesta electrónica, después de sufrir al menos tres paros cardíacos y permanecer con arritmia permanente, informaron fuentes médicas de la capital mediterránea.
Su deceso se produjo en la madrugada de este miércoles en el Hospital de Urgencias la mujer de 37 años que estaba internada en grave estado tras resultar intoxicada en una fiesta electrónica que se llevó a cabo en Córdoba entre el 15 y el 16 de junio.
Se trata Alejandra Mara Pereyra, quien llegó a Córdoba desde Misiones acompañada por su novio, el cual admitió que ambos habían consumido una droga sintética antes de ingresar a la fiesta desarrollada en el complejo Forja, en barrio Talleres Oeste de la Capital.
Tras el evento, hubo al menos otras 28 personas afectadas por consumo de estupefacientes y los investigadores secuestraron gran cantidad de drogas sintéticas. Desde el equipo médico y la Fiscalía a cargo del caso, confirmaron que efectivamente la mujer consumió éxtasis, en el evento al que asistió acompañada por su novio, también de Posadas, el excandidato a intendente de esta ciudad por el Frente de Todos, Martín Halty, junto con otro acompañante.
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En comunicación con medios de la provincia la jefa de la guardia del Hospital Urgencias de Córdoba, toxicóloga Andrea Vilkelis, había asegurado ayer que la misionera atravesó tres paros cardíacos y ahora “está en una situación muy crítica”. De momento, “está con respirador, coma farmacológico. Una vez que se estabilice vamos a empezar a sacar esta medicación y ver qué pasó en ese cerebro después de todas esas resucitaciones”, agregó.
E fiscal de turno en Lucha Contra el Narcotráfico durante esta fiesta electrónica, Carlos Cornejo, indicó que “apenas tomamos conocimiento se inició en investigación judicial y en ese contexto una persona que hacía las veces de acompañante y entiendo que es la pareja de ella, más otra persona, fueron convocadas a dar declaración y dieron una versión vinculada al consumo de esta sustancia sintética e hicieron una referencia a cómo la habían adquirido, de dónde la habían adquirido e informaron que ellos ya la habían traído desde Misiones. La habían comprado a una persona y brindaron una serie de información que permitiría ubicar a esta persona”.
Aunque en declaraciones a Radio Mitre de la Ciudad de Buenos Aires el mismo fiscal Cornejo brindó otra versión: “Se ha receptado declaración a la pareja de esta persona y a un amigo que los acompañaba, ellos concurriendo al evento, habrían adquirido en inmediaciones la sustancia y a esta chica la ha llevado en esta situación médica. Es autoconsumo, no estaríamos en presencia de comercialización de estupefacientes en el marco de este evento. No la han adquirido en el interior del complejo”, dijo Carlos Cornejo a Mitre 810.
Consideró que los acompañantes “son testigos”, y “acá hay que distinguir dos cosas: el consumo de sustancias estupefacientes a nivel nacional y en función de un precedente de la Corte Suprema y Justicia de la Nación no es punible. En ese contexto si el consumo no se hace de una manera ostensible y que perjudique a terceros no acarrea una sanción, entonces ellos son testigos en la causa. Por eso es que han podido compartir esta información con nosotros”.
“La causa ahora en un principio tiene como objetivo preliminar tratar de establecer si dentro del predio o en las inmediaciones del predio, o en algún lugar de Córdoba, previo a asistir a este evento, ellos habían adquirido la sustancia estupefaciente y en razón de eso desarrollar una investigación para tratar de ubicar en qué lugar de Córdoba o el ámbito del predio donde se realizó esa posible adquisición. Aunque eso quedó descartado de plano ya que fueron ellos mismos los que informaron”, afirmó Cornejo.
En cuanto a un posible cambio de carátula y que se agrave la situación judicial de los acompañantes y de los organizadores del evento, Cornejo dijo que “no. En función de la experiencia que yo he tenido con un caso idéntico a este caso, con un grupo de chicos de Rosario en un evento de esta misma característica en el año 2017, sí se han tomado todas las precauciones y todos los recaudos para tratar de evitar que adentro del espectáculo no se comercialicen sustancias estupefacientes y que en el marco de los controles se evite el ingreso, no acarrea una responsabilidad”.
El Fiscal cordobés además explicó que tienen “un sistema de atención de turnos acá en la provincia de Córdoba en el foro de narcotráfico y estaba yo de turno durante este fin de semana y la próxima. En ese contexto, nosotros cada vez que hay algún evento de estas características denominadas fiestas electrónicas, se diseñan una serie de operativos preventivos que tienen como objetivo tratar de evitar el ingreso de estupefaciente. Estos procedimientos han sido bastante exitosos en las últimas presentaciones de estos DJ que vienen y que generan una concurrencia masiva de personas, incluso de otras provincias como en el caso de esta gente”.
“Dentro de ese marco se logró el secuestro de distintas sustancias a distintos concurrentes, pero evidentemente hubo personas que lograron ingresar o que eventualmente lo han consumido fuera del ámbito de del evento y después ha habido muchas personas que sufrieron descomposturas. Se prevé la existencia de puestos sanitarios para asistir a estas personas porque es común que esto ocurra y lamentablemente hay ocasiones en que estas descomposturas se vuelven mucho más graves y ahí sí son derivados al Hospital de Urgencias de la ciudad de Córdoba”, finalizó.
La “Fiesta” en Córdoba
Francisco Salcedo, jefe de la fuerza policial de Córdoba, contó que “se esperaban alrededor de unas 20.000 personas, el primer día hubo 10.000 y el segundo día alrededor de 12.000 personas hubo 19 personas que entraron a la carpa sanitaria, tres mujeres y 16 hombres mayores. Tuvimos dos personas más complicadas, una de una localidad muy próxima a la Capital, y bueno la señora que vive en Misiones”.
Salcedo coincidió con el Fiscal, en que muchas cosas todavía son “materia de investigación. Pero, sí sabemos a ciencia cierta que estas personas lo han tenido simplemente para el consumo personal, las ingirieron momentos antes de ingresar al evento y también las pastillas fueron traídas desde Misiones, ya que le compraron a un dealer que ya tenían en vista, eso es lo único que tenemos hoy como para poder difundir. Lo demás es materia de investigación, el fiscal está instruyendo nuestros equipos para para seguir en la dinámica de lo que de lo que hace su jurisdicción. Y nos han pedido varias diligencias que estamos haciendo puntualmente”.
Con respecto a cómo llega la droga a Córdoba, el jefe policial indicó que “tenemos muchas rutas de ingreso entre ellos la Triple Frontera, porque sabemos que hay lugares como Brasil que producen este tipo de sustancias, sobre todo el tusi y, también tenemos elaboración de en Buenos Aires, sobre todas las cosas. De acuerdo a la experiencia que ya nosotros tenemos en el campo, las personas tienen confianza con sus dealers, pero eso es inversamente proporcional a su salud porque por más confianza que tengan a sus proveedores, la elaboración de este tipo de pastillas o de sustancias no tiene control, no hay un control sobre ellos, sobre la traza y eso hace que peligre significativamente su vida, en el consumo de este tipo de sustancias e incluso este el hecho de que uno la ingiera no es el mismo efecto sobre otro cuerpo, porque cada uno tiene un sistema metabólico diferente y a cada uno reacciona de manera diferente”.
“También tuvimos un caso paralelo hablando de este tipo de fiestas. El sábado a la madrugada hubo un importante operativo por parte de la fuerza policial antinarcotráfico, donde desbaratamos cuatro fiestas posibles que no estaban relacionadas directamente al evento, pero sí a la finalización del mismo, que son los famosos after. Teníamos información que veníamos trabajando desde hacía prácticamente un año y desembarcamos en dos barrios cerrados. Uno El Balcón y el otro La Docta, dos lugares muy conocidos en Córdoba. Detuvimos al principal investigado, estamos detrás de otra persona que entendemos guarda una estrecha relación en la conformación de este tipo de este eventos, no autorizados y clandestinos”.
En ese operativo, Salcedo remarcó que “secuestramos prácticamente más de 100 pastillas de éxtasis también ketamina, tusi y heroína. Más de 21.000 mil dólares, más de medio millón de pesos, dólares jamaiquinos, euros, reales, pesos iraquíes, pesos mexicanos, dos vehículos de alta gama y tres motos de alta gama. También secuestramos un container lleno con bebidas alcohólicas y aguas. Y todo el sistema que tenía de grupos electrógenos, porque estas fiestas se iban a dar en zonas rurales”.
Por último, Salcedo expresó que “para que tengan una idea les voy a tirar los precios de estas sustancias: El éxtasis está entre 15.000 y 45.000 el gramo; el tusi o cocaína rosa a 25.000 pesos; un troquel de LSD de 7.000 a 15.000 pesos; y el Popper a 20.000 pesos”.
(Fuente: Primera Edición/La Voz)
