Tras el derrame de sustancias tóxicas en el río Paraná conocido semanas atrás, la Justicia investiga a la empresa que podría recibir una sanción internacional y deberá pagar multas.
Juan Luis Fuentes, abogado especialista en Derecho Ambiental y uno de los primeros denunciantes del hecho, en diálogo con “El País de la Libertad” de Radio Up 95.5 explicó cómo continúa la causa que está siendo investigada por la Justicia misionera.
Fuentes explicó cómo tomó conocimiento de la causa: “Este hecho si yo mal no recuerdo había ocurrido un sábado, justamente por mi trabajo ambiental, varias personas me hicieron llegar los videos y las imágenes de los derrames que estaba haciendo la empresa Papel Misionero en el río Paraná. Yo hice las denuncias correspondientes, como otras personas también lo hicieron, se logró un avance y ahora no se están teniendo los mismos resultados”.
Acotó también: “Desde diferentes puntos de la provincia, lo iban viralizando por eso también lo busqué en redes. Mucha gente se comunicó con Ecología (Ministerio de Ecología y Recursos Naturales Renovables de Misiones) y al otro día tuvimos respuestas”.
“Los funcionarios de Ecología estuvieron en el lugar, tomaron las muestras y pudieron dialogar con los responsables. Todo esos son pasos agigantados, y eso es porque mucha gente se preocupó por el tema”. Además, expresó “Cómo inició y dónde está la investigación hoy, desconozco ya que nadie se comunicó conmigo y nadie tomó más cartas en el asunto”.
“Este caso es muy pragmático para mí porque se ve un montón de cosas que a veces enseñamos en la facultad, de la industria, de los ciudadanos, es decir es más bien derecho interdisciplinario. Hicimos el pedido de acceso a la información, sabemos que el Ministerio deEecología está trabajando y la empresa está haciendo lo propio, pero hoy no hay nuevos avances”, dijo Fuentes.
Para finalizar, el abogado agregó: “En principio, el nivel de conservación y cuidado del medio ambiente siempre nos parece poco, la ciudadanía tiene que involucrarse más en estos temas. Las empresas al recibir estas denuncias, si se comprueban pueden perder certificaciones internacionales y podrían perder plazas comerciales, por ende, ellos tienen que demostrar con procesos internos que su trabajo fue impecable y que no dañaron el medio ambiente, es un arduo trabajo, paso a paso y con tiempos muy lentos. Perder una certificación internacional les dolería más que pagar una multa”.