Como todos los años, la cercanía de las Fiestas fueron motivo de reiteración de mensajes de pedidos solidarios a no usar cohetería de alto impacto en Posadas y el consejo fue sustituir los fuegos artificiales por pirotecnia luminosa. La Fundación de Apoyo a Padres de Hijos del Espectro Autista reconocen el cambio de conciencia por parte de la sociedad; aunque durante la Nochebuena, los estruendos fueron ensordecedores durante varios minutos antes, y después de las 12.
Eduardo Sixto, de la Fundación de Apoyo a Padres de Hijos del Espectro Autista (FAPADHEA), en diálogo con “Primera Vuelta” de Radio Up 95.5 y explicó “hemos percibido que se tiró muchísimo menos pirotecnia que otros años. Hubo, pero fue principalmente en el pico de la hora 12 y no hubo antes, ni hubo mayormente después. Por lo menos no hubo en demasía, puede ser por lo económico, o por el cambio de conciencia por parte de la sociedad”.
“Cuando una familia se plantea comprar pirotecnia, contempla el gasto y decide hacerlo igual, pero entendemos que hay gente que va cambiando la actitud; muchos hacen silencio o contemplan lo que pasa alrededor y esto es un cambio de actitud, eso es algo que la sociedad fue aprendiendo y eso nos alegra muchísimo”, explicó Sixto.
La pirotecnia sonora puede resultar especialmente molestos para las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) hipersensibles al ruido, provocándoles irritabilidad, nerviosismo, miedo o ansiedad. Incluso algunas de ellas sienten la necesidad de huir y buscar un sitio tranquilo y seguro.
Al ser consultado sobre cómo vive la navidad una familia que entre sus integrantes tiene una persona con autismo, explicó: “En tiempos anteriores, para las familias era un karma y mucho dolor; hoy en día es mucho más llevadero porque hay menos pirotecnia y menos ruido, generalmente los chicos que son sensibles al sonido sufren muchísimo y por ende sufren todo su contexto porque muchas familias no pasaban con el grupo familiar completo, no pasaban con la paz que necesitan, con la alegría que necesitan porque los chicos sufren un dolor neurológico muy grande, es el dolor digamos incontrolable para el chico”.
La alusión de Sixto guarda relación con una de las características del trastorno del espectro autista, afección relacionada con el desarrollo del cerebro que afecta la manera en la que una persona percibe y socializa con otros; por lo tanto los sonidos abruptos y altos pueden causar problemas en la interacción social y la comunicación. El trastorno también comprende patrones de conducta restringidos y repetitivos. El término «espectro» en el trastorno del espectro autista se refiere a un amplio abanico de síntomas y gravedad.
“Los chicos la pasan mal, no es una cuestión de gusto. Es una cuestión clínica, neurológica, médica. Eso es lo que hicimos, la prensa nos ayudó muchísimo, porque ustedes nos ayudaron a difundir lo que pasaba a veces en el rincón de la casa de una familia y esa familia comenta lo incómodo que es ver sufrir a un ser querido”, explicó Sixto.
“La Hora Azul” en los supermercados
La “Hora Azul” propone a los comercios a capacitarse dentro del enfoque legal y técnico de la disposición, que plantea la creación de un horario comercial inclusivo, amigable para los familiares de las personas con trastornos sensoriales Trastorno del Espectro Autista (TEA), Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).
El funcionamiento del centro comercial será el mismo de siempre, la única diferencia dentro de este horario, es la reducción lumínica y sonora de toda la cartelería lumínica, heladeras, pantallas, cajas, y demás elementos que convivan dentro del comercio o supermercado.
Logrando un espacio libre de contaminación lumínica y sonora que permita a familiares y a consumidores hipervulnerables realizar sus compras sin una sobre estimulación sensorial, determinando así un espacio amigable e inclusivo real.
Eduardo Sixto, de la Fundación de Apoyo a Padres de Hijos del Espectro Autista, explicó: “Algunos comercios lo fueron aplicando y esto ayuda mucho, cada comercio decide en que horario aplicarlo. Esto es una herramienta que ayuda a los padres, a los tíos que antes tenían que buscar una niñera o alguien que cuide a los niños para poder ir a hacer las compras, es tratar de hacer que la vida cotidiana sea más tranquila y ordenada para todos, especialmente para las familias autistas”.