En diálogo con Alejandro Chini y Bryan Villalba en “La última Rosca” por RadioUp 95.5, el exdiputado provincial radical, Walter Molina, se manifestó a favor de la continuidad del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) y la necesidad de mantener la regulación de precios en el sector yerbatero.
Molina expresó su preocupación por las recientes designaciones en el INYM y destacó la importancia de mantener una comisión asesora para abordar los desafíos económicos que enfrenta el sector. Hizo hincapié en las consecuencias de un cambio de gobierno nacional y señaló que el INYM, creado a partir de una ley impulsada por el radicalismo, desempeñó un papel crucial en la regulación del mercado de la yerba mate. “Estamos sumamente preocupados por lo que está pasando, más allá de las designaciones que por obvias razones están ocurriendo. Porque, bueno, claramente hay un cambio de gobierno nacional”, aseguró.
El exlegislador recordó la lucha de hace décadas, encabezada por el también diputado mandato cumplido Raúl Solmoirago, que culminó con la creación del INYM. Molina resaltó la importancia de esta institución para el sector productivo, que en el pasado se vio desprotegido durante una década tras la desaparición de la Comisión Reguladora de la Yerba Mate.
“Una ley que pasó por el Congreso de la Nación, impulsada casualmente por el radicalismo. En aquel entonces Solmoirago fue el que inició este proceso tan largo con tantas luchas que terminó en lo que es hoy el Instituto Nacional de la Yerba Mate”, recordó.
Molina también abordó la actual situación económica, destacando la devaluación y sus impactos en los precios y en la capacidad de planificación de los productores y señaló la complejidad de la coyuntura, con la suba del dólar y del combustible, abogando por la necesidad de revisar los precios en el contexto actual.
“Me parece que es muy bueno empezar a sortear desde un punto de partida que es el precio sostén y esto le hace muy bien a los productores porque medianamente le permite planificar cosa que antes no existía más allá que por ahí con el precio es una buena noticia muchas veces por ahí no alcanza”, afirmó.
En cuanto a la posibilidad de desregular el precio de la yerba mate, Molina se mostró en desacuerdo con esa perspectiva, citando ejemplos de institutos similares en otras industrias. Defendió la necesidad de mantener la regulación, argumentando que el mercado no siempre puede autorregularse y que la yerba mate es un producto fundamental para la economía regional.