La provincia de Misiones enfrenta una situación crítica luego de sufrir consecutivos temporales que dejaron estragos en la red eléctrica. La prestataria oficial del sistema eléctrico en la provincia no invierte lo necesario en modernizar el tendido y las consecuencias son largas jornadas sin luz en gran parte de las localidades misioneras. A pesar de la propagando institucional sobre el nivel de inversiones, la realidad mata relato.
Las tormentas, caracterizadas por fuertes lluvias, vientos intensos, caída de piedra y granizo, generaron complicaciones significativas en la infraestructura energética de la provincia. Los daños reportados incluyen la caída de postes de media y baja tensión, así como la obstrucción de líneas debido a la caída de árboles de considerables dimensiones.
«Las consecuencias de estos eventos climáticos han afectado enormemente a la comunidad misionera y se han extendido por toda la provincia, provocando la caída de transformadores, voladuras de techos y chapas sobre los conductores eléctricos; caída masiva de postes y obstrucción de líneas debido a árboles de gran porte», informó EMSA.
Las localidades más afectadas, donde se concentraron los esfuerzos de recuperación, incluyen 25 de Mayo, Alem, Andresito, Candelaria, Cerro Corá, El Soberbio, Eldorado, Posadas, Garupá, Puerto Libertad, Pozo Azul, Puerto Iguazú, Wanda, Campo Grande y Bernardo de Irigoyen. La empresa provincial de energía señaló que la magnitud de los daños en estos municipios llevó a evaluaciones millonarias para la restauración y renovación de equipamiento.
(Fuente: Primera Edición)