Según reveló el Observatorio de Violencia Familiar y de Género de Misiones, en colaboración con el Ministerio de Gobierno y el Instituto Provincial de Estadística y Censos (IPEC), el cierre de año en la provincia de Misiones se ve empañado por cifras alarmantes en cuanto a denuncias por violencia familiar y de género, así como un preocupante incremento en los femicidios.
La titular del IPEC, Silvana Labat, compartió datos inquietantes. Hasta el 31 de octubre del presente año, se registraron un total de 24.700 denuncias por violencia de género y violencia familiar, cifra que se aproxima a la totalidad de denuncias del año anterior, que fue de 25,735.
En el caso de los femicidios, el panorama es aún más sombrío. Este año se contabilizaron ocho casos, dos más que en el mismo período del año anterior. El 77.5% de las víctimas son mujeres, y se observa también un preocupante aumento en el porcentaje de niños, niñas y adolescentes afectados.
La problemática de la violencia de género se ha vuelto una cuestión social y cultural en Misiones, según destacó Labat. Aunque se reconoce que hay esfuerzos para desnaturalizarla, la violencia sigue presente en los hogares, siendo motivo de profunda preocupación para las autoridades y la sociedad en general.
Labat subrayó la importancia de la reflexión colectiva y la necesidad de abordar esta problemática desde sus raíces culturales. “Uno ve que las denuncias van creciendo año a año”, lamentó la titular del IPEC, llamando a la acción y concienciación de toda la sociedad misionera para combatir este fenómeno persistente.
Patrón alarmante
Hay una cifra que no baja, no cambia y alarma con el correr de los años. Es que el 77,5% de las víctimas, en todos los casos (femicidios, violencia familiar y de género) son mujeres.
En el desglose, Labat dijo que “el porcentaje más alto de víctimas se da entre los 20 y 29 años, y los agresores también tienen esa edad, es una cifra que se repite año a año”, en una provincia como la nuestra, donde se encuentra la población más joven del país, con un promedio de 28 años.
Luego, “le siguen las víctimas de 30 a 39 años, que también se va repitiendo a lo largo de los años. Y tenemos un 8,9% de adolescentes víctimas de violencia, que van desde los 14 y 19 años“, destacó.
Con respecto al vox populi que apunta a que la violencia familiar y de género se encuentra principalmente en los sectores más vulnerables, expresó que “es una falacia”. En cambio, explicó que “la violencia está presente en todos los sectores sin distinción de los estratos económicos, lo que pasa es que muchas veces, en los más altos, se esconde un poquito más”, dijo.
Datos del 2022
El IPEC, a través del Observatorio, recientemente publicó los datos relevados por la Policía de Misiones el año pasado. En la provincia hubo un total de 25.735 denuncias por violencia familiar y de género. Por mes, hubo 2.145 denuncias de ambos casos, que se traduce a 2,9 por día.
En comparación al 2021, hubo un aumento del 9,1% de denuncias presentadas, según el informe.
Siguiendo con los datos, Silvana Labat explicó que “el 21% de las víctimas ya tenían denuncias previas contra su victimario el año pasado, y eso bajó con respecto al 2021, donde las cifras llegaban al 50%”. En esa línea, dijo que “nos muestra un cambio, pero falta mucho, porque en vez de bajar los femicidios, seguimos subiendo. Somos una población chica, 1.400.000 habitantes, y tenemos ocho femicidios, venimos hace tiempo encabezando las estadísticas de femicidios en el país”, lamentó.
A estos datos que erizan la piel, agregó que “en 2022 tuvimos casi tres denuncias por hora, por violencia familiar y de género, y 19 denuncias por cada mil habitantes, es muchísimo y asustan los datos”.
Por último, con respecto a la contención de las víctimas, explicó que siempre deberían estar acompañados por un equipo interdisciplinario de apoyo, con el psicólogo a la cabeza.
Sobre las denuncias en sí, dijo que “el 62% de las víctimas pide la restricción de acercamiento. Pero una cosa que es lo que pide la víctima y otra cosa es lo que determina la Justicia, y en la mitad de los casos se da la prohibición de acercamiento. Después piden otras medidas como asesoramiento legal, social, y por último, la exclusión del hogar”, cerró.
(Fuente: Primera Edición)