Se trata de una entidad sin fines de lucro radicada en Posadas, que es mencionada por el extitular del Instituto del Fomento del Agro y la Industria, Juan Marcelo Rodríguez, en una conversación con una de las decenas de mujeres de las que habría obtenido favores sexuales a cambio de dádivas.
En las últimas semanas, el gobierno provincial se presta a sepultar definitivamente el escándalo del IFAI (Instituto de Fomento del Agro y la Industria), que fuera escándalo nacional en abril del 2022, al conocerse las conversaciones y chats del ex titular del organismo Juan Marcelo Rodríguez, con decenas de mujeres de las que habría obtenido favores sexuales a cambio de contratos laborales, subsidios y dádivas.
Sin embargo, la reciente difusión del Presupuesto 2024 en el Boletín Oficial (n° 15.974) confirmó que una de las fundaciones que forman parte del caso de presuntas malversación de fondos públicos, tráfico de influencias, dádivas, coima, negociaciones incompatibles y explotación sexual, recibirá más de dos millones de pesos en subsidios en 2024.
Se trata de la Fundación Pindaity (Personería Jurídica A–3725) de Posadas, que recibirá un subsidio de $2.173.824 según consta en el Presupuesto 2024, proyecto aprobado en la Cámara de Representantes con votos de diputados renovadores y otros aliados.
A la fecha, la única mención pública de la actividad de la Fundación Pindaity, la publicó el medio afín al Gobierno Renovador, “Economis”, de Posadas, que informó sobre un taller de “reconexión para un gran año”, realizado el 29 de enero en el Museo Aníbal Cambas, ubicado en calle Roque González 3300, es decir, detrás de la Legislatura.
Se trató de “una actividad relajada y constructiva de verano” dictado por una doctora en Acupuntura Bioenergética y Moxibustión, que “en la ocasión brindará tips [consejos] para lograr el equilibrio en todos los ámbitos de la vida”.
Poco tiempo después, en una conversación que dataría de 2021, el ex presidente del IFAI, Juan Marcelo Rodríguez menciona a esta fundación en una conversación privada que habría mantenido a través de whatsapp con una joven, a quien le explicó como debería solicitar un subsidio de unos $200 mil. Esta conversación forma parte de las escandalosas filtraciones que fueron noticia nacional y que derivaron en la renuncia del funcionario, en abril del 2022.
En los audios que Rodríguez habría enviado a la joven que estaría vinculada a la Fundación Pindaity, el ex funcionario pide “llamame cuando puedas” y luego envía un mensaje de voz. En ese primer audio Rodríguez explica cómo debe realizar el pedido del subsidio a su despacho y sostiene “me dirijo a ud. a los efectos de solicitarle una asistencia financiera para comenzar la construcción de un alojamiento en el barrio Itaembé Guazú”.
Luego, prosigue: “este alojamiento que va al servicio a la oferta turística, en la provincia de Misiones y en la ciudad de Posadas, donde está planificado una primera etapa de movimiento de suelos y el crédito es para financiar esas acciones. O esa primera construcción de obra. Solicito la suma de $200 mil de crédito. Esperando una respuesta favorable, me despido muy atentamente, vos”, sostiene Rodríguez en el audio, con la recomendación sobre cómo redactar un pedido de subsidio al IFAI –es decir, dirigido a él mismo.
En ese primer audio (de la conversación del ex funcionario y la joven) que forma parte del caso IFAI-Gate, Rodríguez –o alguien con idéntica voz, inflexión y forma de hablar– añade: “A esa nota le tenés que firmar y anexar, fotocopia de tu documento de ambos lados, le tenés que agregar certificado de domicilio real de la policía y nada más, ¿sabés?”.
“Yo cuando autorizo, pongo crédito (…) mil pesos, un año de gracia, 24 cuotas de devolución y tasa cero de interés. Y con eso, todos contentos y felices. Después te va a llamar mi jefa de créditos, María Laura, para pedirte unas cosas más. Y que pases a (…) cuánto sale cada cuota y firmar el pagaré, (…). No tenés que empeñar tu auto, ni tener una hipoteca, sino que es con pagaré. Y todos contentos y felices. Te mando un beso”, afirma quien sería Rodríguez sobre el oscuro pedido de un subsidio.
Ante este audio, la joven responde “genial Marce, graciasssss”, agregando emoticones.
Acto seguido, Rodríguez envió otros dos audios que fueron viralizados en la conversación. “De verdad me encantó escucharte y me siento muy bien con vos. Hay una conexión hermosa entre nosotros y no la quiero perder, ¿sabés? Así que ni bien me recupere quiero tomar unos mates con vos, conversar, animarnos. Sos una mujer maravillosa y lo sabés, vales muchísimo, cuidate vida. Y espero los papeles que te pedí, así por lo menos tenés el 20 por ciento de lo que te falta”, expresa el ex funcionario a quien se lo describió como “dueño de un harén”.
En el tercer audio, Rodríguez pregunta: “¿Corazón, cómo se llamaba tu asociación? Que no recuerdo porfi?”
Y la respuesta de la joven es una captura de pantalla con el nombre “Fundación Pindaity. Pers. Jurídica A–3725”, es decir, la misma asociación sin fines de lucro con la misma personería que aparece recibiendo más de 2 millones de pesos en el Presupuesto 2024.
Toda esta conversación que arroja sospechas sobre el funcionamiento del IFAI –que el gobierno renovador de la provincia, ahora rebautiza como Instituto de Macroeconomía Circular (IMAC)– y sobre la fundación Pindaity, forma parte del expediente judicial que tiene en sus manos el juez de instrucción Ricardo Balor, una causa cajoneada y paralizada, que se originó por la denuncia del propio Rodríguez contra supuestos hackers por la violación de su privacidad.
Por supuesto, Rodríguez alegó que los audios son apócrifos, pero hasta el momento, la justicia misionera no investigó la autenticidad de los audios y conversaciones. Si es que se realizaron pericias al celular del ex presidente del IFAI, los resultados no se conocen.
Ya renunciado, el expresidente del IFAI denunció ante la Unidad de Cibercrimen de la Policía de Misiones, que su Whatsapp había sido hackeado y radicó otra denuncia contra la red social Facebook, por la cuenta falsa que hicieron con su nombre, donde filtraron las conversaciones sexuales. Esta denuncia desestimada por Cibercrimen, que sí avanzó por el oscuro, y para muchos interminable, derrotero para develar la identidad de quien accedió al whatsapp del funcionario y lo publicó en las redes sociales.
Para el 20 de abril del año pasado, el juez Balor expidió un oficio a la empresa Meta (Facebook), dueños también de Whatsapp, para que entreguen los datos de el o los usuarios que supuestamente “hackeraon” la cuenta de mensajería de Rodríguez y, capturaron toda la información privada y la habrían adulterada para publicarla en la red social a través de un perfil falso.
A casi 17 meses de los hecho, Radio Up 95.5 consultó al juez sobre lo que vienen haciendo para investigar a los supuestos hackers. Y Balor reveló: “el día 7 de este mes (septiembre) se reiteraron los oficios por no haber obtenido respuesta a la fecha”. Es decir, la principal medida de prueba para desenmascarar a los supuestos “hackers” que desataron el escándalo en el IFAI, no prosperó aún.
Sin embargo, no hubo investigaciones sobre los presuntos contubernios y los encuentros que habrían tenido lugar en las oficinas del IFAI –en algunas conversaciones, Rodríguez citaba a sus víctimas en su despacho en horarios no laborables, presuntamente para consumar encuentros sexuales–. No se avanzó con indagaciones por los posibles delitos de coimas, negociaciones incompatibles, soborno, extorsión y malversación de fondos públicos, entre otros.
Lo que sí parece evidente, es que las fundaciones y asociaciones civiles podrían jugar un papel central en el entramado de manejos poco claros del IFAI, durante la gestión de Rodríguez.
Para el 2024, el estado provincial asignó a través del Presupuesto, $2.353.912.000 para entidades sin fines de lucro. Entre ellas, asignaron más de $456 millones a una cooperativa de alumnos y profesores de la Escuela de Robótica –cuya directora preside la Coopknow– y a una asociación que pertenece a una funcionaria o ex funcionaria del Ministerio de Desarrollo Social.
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