Dentro de un móvil policial, uniformados de la Comisaría Quinta de Oberá le practicaron Reanimación Cardiopulmonar (RCP) a un niño de 2 años que convulsionaba y no podía respirar.
A las 15 de ayer, por medio de la línea de emergencia 911, la guardia policial fue alertada de que en el barrio San Miguel de la localidad una familia necesitaba asistencia, debido a que su bebé se descompensó y perdió las pulsaciones.
Según fuentes policiales, los uniformados se presentaron raudamente en el domicilio y constataron que el niño, llamado Gerardo, tenía dificultades para respirar.
Dada la situación y de manera urgente, acompañados de la madre, los efectivos subieron al patrullero al menor para trasladarlo hasta el hospital Samic de Oberá.
En el camino y cuando el bebé se moería, los agentes le practicaron maniobras de RCP al bebé, logrando estabilizarlo. Al llegar al hospital, según detalló la policía, el niño de 2 años fue atendido por el personal de salud, quienes continuaron con su correcta recuperación.