En un fallo de profundo valor simbólico y jurídico, el Juzgado de Familia, Niñez y Adolescencia N.º 5 de Corrientes autorizó a una adolescente de 14 años a dejar de usar el apellido de su padre, condenado por el femicidio de su madre, y a llevar únicamente el apellido materno.
Esta decisión, cargada de sensibilidad y justicia, responde a un pedido sostenido por la joven y su entorno familiar, quienes contaron con el acompañamiento legal del Estado provincial.
La solicitud fue impulsada por la tía y actual tutora legal de la adolescente, con el patrocinio del Centro de Atención Jurídico Integral a Víctimas de Violencia de Género del Ministerio de Justicia de Corrientes.
La joven, marcada por una historia de violencia, expresó su deseo de identificarse solo con el apellido materno, buscando así cortar el lazo simbólico con su padre, quien cumple prisión perpetua por el homicidio doblemente agravado de su pareja y madre de la adolescente.
Fundamentos
El juez interviniente consideró que existían “justos motivos” para permitir la modificación del apellido, tal como lo prevé el artículo 69 del Código Civil y Comercial, que contempla el cambio de nombre si hay una afectación comprobada a la personalidad.
El pedido fue también avalado por la Asesora de Menores e Incapaces N.º 5, Dra. Alvira, quien representó complementariamente a la adolescente.
Durante el proceso judicial, se incorporaron informes interdisciplinarios psicológicos y psiquiátricos que confirmaron que la adolescente sufre trastornos emocionales y recuerdos traumáticos vinculados a la figura paterna.
Los profesionales concluyeron que el apellido del padre representa para ella un símbolo de dolor, violencia y pérdida, afectando directamente su salud psíquica y emocional.
Además, la joven manifestó no identificarse con su progenitor, expresó rechazo hacia él y reafirmó su fuerte vínculo afectivo con la familia materna, con quienes convive actualmente.
El fallo también subraya que el pedido no fue impulsado por enojo o razones superficiales, sino que forma parte de un proceso profundo de reconstrucción identitaria, en el marco de su duelo y la búsqueda de estabilidad emocional.
El juez valoró que el progenitor fue debidamente notificado en el penal donde se encuentra detenido, y no participó del proceso ni presentó oposición a la solicitud.
Reparación
El juzgado ya había intervenido previamente en el proceso de tutela de la adolescente y actualmente lleva adelante una acción para garantizar su protección integral.
Como resultado de esta resolución, se ordenó al Registro Provincial de las Personas emitir una nueva documentación oficial a nombre de la joven, reflejando su nuevo apellido materno.
Este fallo representa no solo un acto de justicia, sino también una reparación emocional y simbólica significativa.
Garantiza el derecho de la adolescente a vivir libre de ataduras con el pasado violento, afirmando su identidad, dignidad y salud emocional en el camino hacia su reconstrucción.