La aprobación en la Cámara de Diputados del proyecto de ley que establece una suba en las jubilaciones volvió a agitar los mercados financieros. Este jueves, los bonos soberanos argentinos registraron una fuerte caída, y el ministro de Economía, Luis Caputo, no tardó en responsabilizar directamente al Congreso por el impacto negativo en los activos del país.
El titular del Palacio de Hacienda avaló en la red social X un mensaje que señalaba: “Cada vez que la corporación política que quebró el país se junta a debatir cómo destruir el equilibrio fiscal, el Riesgo País sube. Porque ellos son el verdadero Riesgo País, no las reservas, no el dólar ni el FMI”.
Caputo respondió con un escueto pero elocuente “Correctísimo”, dejando en claro su apoyo a la afirmación y reforzando el discurso oficial que viene sosteniendo el gobierno de Javier Milei: el mayor riesgo para la economía argentina no son los factores externos, sino las decisiones internas de la dirigencia política tradicional.
Correctísimo https://t.co/fSquSoGRq1
— totocaputo (@LuisCaputoAR) June 5, 2025
El equilibrio fiscal como bandera oficial
La reacción del ministro no sorprendió en el entorno económico. El gobierno de La Libertad Avanza ha hecho del equilibrio fiscal una de sus principales banderas, especialmente desde que se alcanzó el superávit primario en los primeros meses de gestión.
Ayer mismo, Caputo había apuntado contra los legisladores que votaron a favor del aumento jubilatorio, a quienes llamó “degenerados fiscales” en un posteo también en la red X. “Saluden a los degenerados fiscales que se van. En octubre hay elecciones y a la sociedad ya no la engañan haciéndose los abanderados de las causas nobles”, escribió, en una crítica directa a quienes, según él, usan el gasto público con fines electorales.
Saluden a los degenerados fiscales que se van. En Octubre hay elecciones y a la sociedad ya no la engañan haciéndose los abanderados de las causas nobles…
— totocaputo (@LuisCaputoAR) June 5, 2025
Caída de bonos y aumento del riesgo país
Tras la votación en Diputados, los bonos de la deuda argentina experimentaron una baja sostenida, lo que generó preocupación entre inversores. Al mismo tiempo, el riesgo país volvió a incrementarse, revirtiendo la tendencia de los últimos días.
Desde el Ministerio de Economía sostienen que las señales políticas inconsistentes —como aprobar aumentos de gasto sin fuentes de financiamiento claras— son interpretadas por los mercados como una amenaza directa a la estabilidad fiscal y, por ende, a la credibilidad del plan económico del gobierno.

Debate en el Congreso y oposición al ajuste
La votación en Diputados dejó en evidencia las tensiones políticas en torno al ajuste. Mientras el Ejecutivo insiste en mantener un rumbo fiscal austero, sectores de la oposición, incluso algunos que apoyaron parcialmente la Ley Bases, impulsan medidas de ampliación de gasto social como el refuerzo a las jubilaciones.
En este contexto, Caputo y el propio presidente Milei han endurecido su postura discursiva contra lo que denominan “la casta política” que “quebró al país”. La estrategia es clara: sostener el superávit como valor innegociable, incluso a costa de tensiones institucionales.

¿Qué sigue?
Aunque el proyecto de aumento jubilatorio aún debe pasar por el Senado, el Ejecutivo ya dejó entrever que lo vetaría si se convierte en ley. La posibilidad de un nuevo conflicto entre el Congreso y el Poder Ejecutivo está latente, mientras los mercados siguen reaccionando ante cualquier señal que ponga en duda el rumbo económico.
La situación reabre el debate sobre cuánto margen tiene el Gobierno para sostener el ajuste y qué efectos políticos y sociales puede tener la negativa a ampliar el gasto en sectores vulnerables como los jubilados.
Por lo pronto, Caputo vuelve a dejar en claro que, para el oficialismo, no hay otro camino posible que el del orden fiscal estricto. Y que cualquier desvío, incluso con fines sociales, puede poner en riesgo el delicado equilibrio que el Gobierno considera un logro central de su gestión.