Semino se desempeña además como Defensor de la Tercera Edad en la Ciudad de Buenos Aires. Brindó su visión sobre la realidad del PAMI en la actualidad y señaló que los funcionarios «no se acercan a las oficinas» por la campaña electoral.
En la jornada de hoy, en el programa «Primera Vuelta» que se emite por Radio Up 95.5, Semino realizó un análisis sobre cómo afecta la crisis al adulto mayor y las condiciones del PAMI para atender este cuestión.
«Tenemos a nivel nacional más de 7 millones de jubilados que están muy por debajo de la cobertura de sus necesidades básicas y esto se viene profundizando a través del tiempo y de las administraciones», comenzó diciendo Semino.
«En la canasta básica del adulto mayor hay algunas cosas que pesan más que en la inflación general. Me refiero al alimento sano, hiposódico e hipocalórico que hoy no se pueden consumir directamente y esto redunda en términos de la pérdida de salud. Lo mismo ocurre con los medicamentos», aseguró Semino.
Con respecto a la inflación que afecta de lleno al adulto mayor, Semino acotó: «Hoy, cuando se conozca el índice de inflación a nivel general, que según distintas opiniones va a ser realmente alto, vamos a encontrarnos con alimentos y medicamentos por sobre ese nivel general; así que en una canasta tan reducida como la del adulto mayor, esto pesa muchísimo».
Semino habló sobre la atención a la salud y aseguró que es uno de los temas más complicados de la actualidad: «Sobre la atención a la salud, este tema está absolutamente resentido en forma estructural y por otra parte con temas de coyunturas no menores: estuvimos todo el mes de agosto sin sistema informático del PAMI, eso genera interrupciones de entregas de insumos, de tratamientos oncológicos, etc».
«Este panorama, sumado a otros como la vivienda, un tema muy serio porque incluso en grandes ciudades un gasto de expensas está alrededor de 40, 50 mil pesos. Aún siendo propietario se le lleva el 40% de lo que percibe. Al día de hoy las jubilaciones mínimas que son la gran mayoría, con el bono incluído, son 124mil pesos en el bolsillo» añadió.
«No veo que estos temas sean un motivo de debate y de preocupación, aún en pleno debate electoral», lamentó Semino.
«Los alimentos más sanos son los más caros para el adulto mayor. Lo hiposódico y lo hipocalórico es indispensable en términos de patologías crónicas que tenemos los adultos mayores en forma muy extendida, son también insustituibles. Cuando no apelamos a ese alimento lo que reemplazamos es eso por el medicamento, ese tipo de medicamentos tienen un efecto rebote porque uno no puede dejar de consumirlo, se vuele dependiente y se forma un círculo vicioso en el cual estamos metidos. La política no toma cuenta de esto», dijo en referencia a las recomendaciones médicas que los adultos mayores deben realizar y se ven impedidos por los elevados precios.
«No hay nada más caro para los estados que mantener la pobreza y la inclusión. No es solo caro en términos de pérdidas humanas, sino en costos de medicamentos e insumos. La salud no está para atender exclusivamente a la enfermedad, sino para generar estas condiciones de vida», reflexionó el especialista.
Por último , Semino realizó un análisis sobre la actual gestión del PAMI: «Vi pasar toda la política argentina por el PAMI y vi todos los desavisados de tipo funcionarial que a uno se le ocurra. Sin embargo en esta última gestión y en esta última etapa, lo que veo es un grado de desinterés y deshumanización en la atención. No se le dio ningún tipo de trascendencia a los 5 millones de personas que sufrieron el robo de datos por los hackeos al PAMI. Hoy están habiendo estafas con esos mismos datos», denunció.
«Hoy los funcionarios del PAMI están inmersos en sus propias campañas electorales y no van al instituto. Esto se traslada a que los problemas graves no tienen ni atención ni solución. Lo veo realmente muy grave, y que tampoco es un tema de debate en todo el sistema político. Me parece que hay una despreocupación manifiesta sobre un tema vital para los adultos mayores», concluyó.