El colapso en el control aduanero de Paraguay causa demoras en el paso de camiones desde Argentina, dejando a los conductores expuestos a largas esperas y preocupaciones por la seguridad y por el tiempo de espera.
El acceso sur de Posadas se convirtió en escenario de largas filas de vehículos de carga que transportan mercancías entre Argentina y Paraguay debido a demoras en los controles aduaneros. La situación generó preocupaciones sobre la integridad de los conductores que se ven atrapados durante horas en medio de las largas esperas.
El jefe de resguardo de la cabecera del puente del lado paraguayo, Luis Cabo de Vila, compartió detalles sobre la situación actual en diálogo exclusivo con «Primera Vuelta» por RadioUp 95,5. Según Cabo de Vila, la acumulación de camiones es una situación que se presenta periódicamente, especialmente durante la temporada de comercio internacional y cosecha de granos. Esta época del año experimenta un aumento significativo en la importación y exportación de mercancías.
El principal problema radica en la falta de espacio físico para albergar a tantos camiones en el recinto aduanero, lo que lleva a que muchos de ellos queden estacionados afuera. La capacidad limitada del recinto y el aumento en el tráfico de camiones contribuyeron a la creación de largas filas en el acceso sur de Posadas.
Según Cabo de Vila, la aduana de Paraguay trabaja las 24 horas del día, y los camiones pueden ingresar hasta las 19. Sin embargo, debido a la saturación de camiones, este horario se amplió hasta las 20 e incluso durante los fines de semana. La situación se agrava debido al crecimiento constante del comercio internacional en la región.
El control aduanero en Paraguay se realiza tanto en términos documentales como físicos. Los camiones se dividen en canales de selección, como el canal rojo para controles exhaustivos que incluyen tanto documentación como la inspección de la carga. Los camiones que pasan por el canal verde se someten a controles más simples y rápidos.
La reciente implementación de un nuevo gobierno y la llegada de nuevos funcionarios añadieron complejidad a la situación. Además, la aduana está experimentando un aumento en la cantidad de mercancías en tránsito hacia otras administraciones dentro de Paraguay, lo que llevó a una mayor fiscalización y controles.
Uno de los aspectos más preocupantes de esta situación es la exposición de los conductores de camiones a largas horas de espera a la intemperie, sin acceso a instalaciones sanitarias adecuadas. Se registraron quejas de conductores que sufrieron robos de sus pertenencias personales mientras esperan en las filas.
Ante esta crisis, las autoridades están buscando soluciones urgentes, como la habilitación de áreas adicionales para estacionar camiones en lastre y la optimización de los procesos de control aduanero para acelerar el flujo de vehículos.
Sin embargo, la incertidumbre persiste sobre cuándo se aliviará esta situación, ya que se espera que el comercio internacional y la llegada de mercancías continúen aumentando en los próximos días y semanas. Los conductores y las empresas de transporte siguen preocupados por las demoras y los desafíos que enfrentan en el acceso sur de Posadas.