“A mí me interesaban las comunicaciones que habíamos abierto porque yo quería traer a todos los venezolanos que tienen presos y perseguidos allá injustamente”, destacó Maduro
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, expresó su pesar este sábado por la ruptura de las comunicaciones con el gobierno de Estados Unidos, especialmente después de la revocación de la licencia de la petrolera Chevron, lo que, según él, dificultó la repatriación de los migrantes venezolanos detenidos en ese país.
Durante un acto conmemorativo del Día Internacional de la Mujer en el Paseo Los Próceres, en Caracas, Maduro aseguró que su gobierno había hecho esfuerzos para facilitar el retorno de los venezolanos que se encuentran “presos y perseguidos injustamente” en Estados Unidos, simplemente por su condición de migrantes. “A mí me interesaban las comunicaciones que habíamos abierto porque yo quería traer a todos los venezolanos que tienen presos y perseguidos allá injustament”, destacó el mandatario.
Maduro afirmó que la decisión de Washington de imponer sanciones a Venezuela y cancelar la licencia de Chevron había afectado los viajes que la administración venezolana tenía programados para traer de regreso a los migrantes. “Los viajes que teníamos programados con nuestros aviones para traer a nuestros hermanos migrantes se vieron alterados”, dijo, subrayando que ya se habían completado tres vuelos de repatriación: dos provenientes de Texas y uno más desde Honduras.
Además, el mandatario lamentó la situación de los connacionales en Estados Unidos y reiteró su llamado al respeto por los derechos humanos. “Ser migrante no es un delito”, aseguró, insistiendo en que debe cesar la persecución contra los migrantes en EE. UU. y que estos “merecen respeto, tienen dignidad y tienen familia”.
En relación con las sanciones impuestas por Estados Unidos, Maduro subrayó que el gobierno venezolano estaba dispuesto a permitir que Chevron operara en Venezuela “100 años más”, pero advirtió que “el imperialismo tomó decisiones” que complicaron aún más la situación.
Por último, el presidente venezolano instó a las empresas internacionales a invertir en Venezuela y a evitar dejarse llevar por “el odio”, buscando así promover una mejor relación económica con las empresas extranjeras y superar las tensiones políticas actuales.
Este pronunciamiento de Maduro refleja la persistente tensión en las relaciones diplomáticas entre Venezuela y Estados Unidos, en medio de la crisis migratoria venezolana y las sanciones internacionales que afectan al país sudamericano.
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Fuente: (Noticias Argentinas)
