Luego de que Patricia Antonella Graziosetti presentara su renuncia como secretaria del bloque y acusara a la concejal Adriana Kosnicki de actitudes agresivas, la edil del PRO en Oberá negó rotundamente las acusaciones y aseguró que el conflicto se originó por diferencias en la manera de trabajar.
“La verdad es que no hubo hechos de violencia. Sí se le pidió que se cumpla con el trabajo que se le había asignado”, afirmó Kosnicki en diálogo con “La Última Rosca” de Radio Up 95.5.
La renuncia de Graziosetti al cargo partidario generó revuelo dentro del espacio, ya que en su presentación ante el presidente del PRO en Misiones, Horacio Loreiro, mencionó actitudes agresivas por parte de Kosnicki. Sin embargo, la concejal insistió en que se trató de una diferencia de criterios laborales.
“Si exigirle a alguien que haga su trabajo es maltrato, yo creo que estamos teniendo una diferencia de valores entre personas”, expresó. Y agregó: “Yo vengo de la parte privada, donde cada empleado debe cumplir con sus funciones. En el Consejo lo manejo de la misma manera”.
Un conflicto que venía de antes
Kosnicki aseguró que las diferencias con Graziosetti no surgieron en un solo episodio, sino que venían de tiempo atrás. “Yo no trabajé con gente de mi riñón, sino que le dimos la oportunidad a gente del partido”, explicó. En ese sentido, señaló que no siempre es sencillo trabajar con personas con las que no se tiene una relación previa.
Además, justificó su postura al señalar que en la gestión pública debe haber disciplina y responsabilidad: “Acá tuvimos una reunión en la Comisión de Disciplina y, bueno, la persona que no cumple con su función en el Ejecutivo tiene su sanción. Lo entendemos así”.
Ante la consulta sobre si existió alguna denuncia formal en su contra, la concejal fue tajante: “Totalmente desmentido. Es una nota, nada más. Yo le había enviado un mensaje a esta señora diciéndole que tomara una decisión: o trabajaba y cumplía con sus funciones o presentaba la renuncia”
“Si estas cosas causan ofensa, esta persona debe tratarlo con su terapeuta o con un terapeuta, porque son apreciaciones personales de cada uno”, agregó Kosnicki, minimizando el conflicto.
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El funcionamiento del bloque opositor
Otro punto que se puso en discusión fue la existencia de un bloque propio del PRO en Oberá. Kosnicki aclaró que “hasta ahora veníamos trabajando en el bloque Avancemos” y que, si bien hubo una iniciativa de formar un bloque independiente, finalmente no se concretó.
Actualmente, la oposición en el Concejo Deliberante de Oberá está dividida en dos bloques: uno integrado por Mara Frontini y otro conformado por Kosnicki y el concejal Aníbal Ramírez.
La edil insistió en que su objetivo es revalorizar el trabajo público y garantizar el cumplimiento de las funciones de cada empleado: “Esto es dinero del pueblo. Sí o sí tiene que haber un cumplimiento”, sentenció.