Las vacaciones de verano son un momento esperado por los chicos para descansar y disfrutar, pero también plantean un desafío para los padres: ¿deberían los niños continuar con actividades de aprendizaje durante este período?
En diálogo con Radio Up 95.5, Adriana González, conocida como “La de Matemática” y miembro del equipo Argentinos por la Educación, compartió su opinión sobre cómo manejar el aprendizaje en vacaciones. En este sentido, González, quien también dirige un canal de Twitch donde brinda clases y responde consultas de matemáticas, destacó la importancia de no abandonar completamente las actividades educativas durante el receso.
Actualmente, “estudios muestran que dejar de practicar por completo no es saludable en términos de aprendizaje. Si terminás las clases en diciembre y volvés a agarrar un libro en marzo, el tiempo sin ejercicio es un montón”, afirmó. En Argentina, los chicos tienen un promedio de 71 días de vacaciones, y según González, esto puede provocar una pérdida significativa de aprendizajes previos.
Para evitar este retroceso, González sugiere encontrar un balance. “No se trata de estudiar todos los días, pero dedicar un tiempo semanal a actividades lúdicas y educativas puede marcar la diferencia”, explicó. Entre sus propuestas se encuentran las salas de escape, ya sea virtuales o caseras, que plantean a los chicos resolver desafíos. “Por ejemplo, crear juegos que incluyan lectura, interpretación y resolución de problemas matemáticos simples puede ser una excelente manera de mantenerlos activos”, agregó.
Además, invitó a las familias a involucrarse en actividades cotidianas que promuevan el aprendizaje. “Ir al almacén puede convertirse en una experiencia educativa: calcular descuentos, comparar precios o trabajar con sistemas de numeración son actividades que los chicos disfrutan y que refuerzan conocimientos”
Otro punto relevante es el uso de dispositivos electrónicos. González reconoció que algunos juegos pueden ser educativos, pero advirtió sobre las consecuencias del uso excesivo del celular. “El problema surge cuando los chicos solo chatean y adoptan formas incorrectas de escritura que luego trasladan a la escuela”, señaló. Además, destacó que el celular puede ser una herramienta útil si se utiliza con propósitos educativos, como aplicaciones de calculadoras científicas.
En el debate sobre cómo manejar el aprendizaje en vacaciones, González enfatizó la importancia del acompañamiento familiar. “Es fundamental que los padres participen y propongan actividades que sean divertidas y enriquecedoras. No se trata de imponer tareas escolares, sino de mantener a los chicos activos y estimulados”, concluyó.
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Te dejamos la entrevista completa:
