La producción citrícola en la provincia de Misiones enfrenta una crisis profunda. Las dificultades no solo provienen de factores climáticos o enfermedades, sino también de los robos sistemáticos de la producción y la falta de respuesta por parte de las autoridades.
En diálogo con Radio Up 95.5, Ricardo Ranger, productor de la región explicó que la producción citrícola en Misiones se encuentra al borde de la extinción: “la citricultura en Misiones casi no existe más, la han destruido. Entre las enfermedades y la falta de apoyo, la mayoría de los productores abandonaron. Hoy somos unos pocos los que seguimos produciendo”.
El productor, quien trabaja los 12 meses del año, resaltó que además de luchar contra plagas y enfermedades como la mancha negra y el HLV (Huanglongbing), debe enfrentarse al robo constante de su producción. Desde septiembre de 2023 hasta la fecha, realizó 83 denuncias, 80 de ellas por robos de cítricos, además de incidentes graves como incendios intencionales.
“El domingo nos prendieron fuego unas dos hectáreas y media de limones. Quedaron destruidas, no sirven más. Es una anarquía total, una tierra de nadie”, afirmó Ranger, al referirse a la situación en la zona del Alto Paraná.
Pese a las reiteradas denuncias, Ranger asegura que la respuesta de las autoridades fue prácticamente inexistente. “La policía está a 150 metros de la comisaría, pero los robos continúan. Nos trajeron una Policía Rural con ocho efectivos, pero no hacen nada. A nosotros nos siguen robando igual”, señaló.
El productor también criticó la falta de acción por parte de la justicia: “si no tenés un abogado que esté todos los días moviendo las causas, las tiran abajo de la mesa. Incluso, hay denuncias que no reconocen porque no nos aceptan como querellantes”.
A esta situación se suma lo que Ranger considera una grave vulneración de derechos: “el Estado no nos brinda seguridad, que es un derecho humano fundamental. Esto no solo afecta nuestra producción, sino nuestra calidad de vida. Presentamos un informe con las denuncias al Ministerio de Gobierno y hasta ahora no recibimos ninguna respuesta”.
El productor concluyó advirtiendo sobre la fragilidad de la frontera con Paraguay, donde asegura que el contrabando y los delitos son moneda corriente: “la frontera está totalmente liberada. En mi zona, si no voy con tres personas armadas, no puedo entrar. Es una situación desesperante”.
Pese a todo, Ranger mantiene la esperanza de que la situación mejore y que las autoridades tomen medidas concretas para garantizar la seguridad de los productores: “Ojalá podamos hablar en el futuro de un panorama mejor, donde la producción esté bien y nuestro trabajo sea valorado”. expresó al finalizar la entrevista.